Estados Unidos vive una nueva conmoción política tras el asesinato del congresista demócrata John Hoffman y el ataque armado contra la representante estatal Melissa Hortman, en hechos ocurridos la noche del viernes 13 de junio en el estado de Minnesota.
Ambos legisladores fueron víctimas de un sujeto armado que vestía chaleco antibalas y se hacía pasar por un oficial de policía. El senador estatal John Hoffman fue abordado en su residencia en la ciudad de Champlin, donde fue herido de muerte. Pocas horas después, la representante Hortman fue atacada en Brooklyn Park, una localidad cercana, y se encuentra herida.
Las autoridades locales informaron que el sospechoso es un hombre blanco, de cabello castaño, que vestía camisa azul, pantalones del mismo color y un chaleco antibalas negro. La policía desplegó un operativo urgente en el área metropolitana de Mineápolis para dar con su paradero.
Aunque aún no se confirma si los ataques están directamente conectados, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, fue enfático: “Esto parece un asesinato por motivos políticos. Nunca habíamos visto algo así en nuestro estado”. La declaración reavivó la preocupación por la seguridad de los funcionarios públicos en Estados Unidos, especialmente en un año preelectoral.
El FBI y agencias federales ya están colaborando en la investigación. Mientras tanto, medios locales reportan que familiares, colegas y ciudadanos se han reunido en vigilia frente al Capitolio estatal para exigir justicia y rechazar la violencia política.
