Oriente Medio está al borde de una guerra nuclear tras el certero ataque de Israel a Irán. Benjamín Netanyahu, primer ministro israelí, lanzó una ofensiva masiva en varias oleadas desde primeras horas del viernes 13 de junio, con cerca de 200 aviones de combate y más de 330 municiones usadas para impactar alrededor de 100 objetivos en Irán.
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Entre los objetivos alcanzados por las Fuerzas Militares de Israel se incluyen instalaciones nucleares Natanz, Fordow, Khondab y Khorramabad; así como bases militares y zonas residenciales vinculadas a altos mandos de la milicia iraní.
Producto del ataque se reportaron bajas sensibles dentro de la cúpula militar de ese país, como la del general Mohammad Bagheri (jefe del Estado Mayor) y el comandante de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salami, entre otros altos oficiales y científicos nucleares
Según se ha podido conocer, el objetivo de esta ofensiva militar de Netanyahu es neutralizar una supuesta amenaza nuclear inminente para Israel y esperan seguir con los ataques hasta eliminarla. Lo más preocupante del caso es que la ofensiva militar de Israel ha llegado hasta Teherán, capital de Irán, en donde cientos de personas han reportado ataques con misiles.
Ante este ataque, Irán respondió y responsabilizaron directamente a Israel y Estados Unidos de atentar en contra de la paz mundial, ya que reconocen este ataque como una evidente declaración de Guerra. De igual forma, respondieron izando la bandera roja de la venganza, que en la tradición chiíta simboliza la venganza y la búsqueda de justicia por una ofensa.
Finalmente, como respuesta inmediata desde Teherán lanzaron más de 100 drones hacia Israel y aunque todos fueron neutralizados por el sistema antiaéreo, desde Irán aseguraron que los ataques continuarán con el fin de buscar justicia ante este grave ataque del que fueron víctimas.