En una jornada marcada por la tensión política y la simultaneidad de eventos clave, el Senado de la República continuó este miércoles 11 de junio con el cuarto y último debate de la reforma laboral, al tiempo que el presidente Gustavo Petro firmaba el decreto que convoca oficialmente a una consulta popular.
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A pesar del ambiente dividido, la plenaria logró aprobar la ponencia mayoritaria del proyecto con 67 votos a favor y 25 en contra. Esta versión fue respaldada por diversos sectores del Congreso, con excepción del Pacto Histórico, movimiento que expresó su rechazo por no considerar incluidas las “líneas rojas” propuestas por el presidente Petro.
Artículos aprobados sin mayor discusión
Durante la sesión, se aprobó un bloque de 17 artículos considerados no polémicos. Entre los artículos ratificados como venían en la ponencia se encuentran el 8, 22, 24, 44, 52, 59, 67, 69 y 73. Otros, como el 26, 27, 28, 30, 31, 43, 58 y 72, fueron aprobados con constancias.
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Además, se estableció una comisión encargada de concertar puntos sensibles del proyecto con el objetivo de avanzar en bloque en los próximos artículos. La discusión fue aplazada para el jueves 12 de junio a las 8:00 a.m.
Consulta popular por “decretazo” de Petro
Mientras avanzaba el debate legislativo, el presidente Petro sorprendió al país con la firma del decreto que convoca a una consulta popular sobre reformas estructurales. La medida generó críticas y abrió una nueva fisura en el ambiente político.
La presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, advirtió que “si el Congreso de la República [...] aprueba una reforma laboral acorde con las necesidades del país, la consulta pierde su razón de ser”.
Por su parte, el ministro del Interior, Armando Benedetti, indicó que el Gobierno está dispuesto a derogar el decreto si el Senado aprueba la reforma: “Supongamos que se firma el decreto. En caso de que el Senado apruebe la reforma laboral, se deroga el decreto”.
Diferencias internas y ponencias enfrentadas
Durante la jornada también se rechazó la ponencia alternativa presentada por la senadora Aída Avella del Pacto Histórico, que recogía íntegramente las propuestas del presidente Petro. Esto generó tensión incluso dentro de los sectores oficialistas, donde figuras como Isabel Zuleta y Angélica Lozano cuestionaron la falta de consenso al interior del Gobierno.
“No nos sentimos representados cuando compañeros hablan que nuestro trabajo no fue serio”, expresó el senador liberal John Jairo Roldán, quien defendió los mínimos cambios introducidos al texto aprobado en la Cámara.
La reforma laboral continúa su trámite en medio de una coyuntura inédita, donde el pulso entre Congreso y Ejecutivo podría redefinir no solo el contenido de la legislación laboral, sino también la estabilidad institucional del país.