Noticias

Qué son las células zombis que aceleran el envejecimiento y el deterioro cognitivo

Estas células, aunque inicialmente inofensivas, dejan de dividirse sin morir, lo que contribuye a la acumulación de tejido deteriorado en el cuerpo humano

metro
El botox es una solución para el bruxismo. (Stevica Mrdja)

En los últimos años, las células senescentes o células zombis han sido el foco de diversas investigaciones debido a su vinculación con enfermedades crónicas y su rol en el aceleramiento del envejecimiento. Estas células, aunque inicialmente inofensivas, dejan de dividirse sin morir, lo que contribuye a la acumulación de tejido deteriorado en el cuerpo humano, afectando órganos clave y aumentando el riesgo de enfermedades degenerativas.

PUBLICIDAD

Le pude interesar: El auge del running en Colombia impulsa la economía y promueve un estilo de vida saludable

¿Qué son las células senescentes?

Las células senescentes fueron identificadas por primera vez en la década de 1960, pero su relación con el envejecimiento y diversas patologías ha cobrado relevancia en las últimas dos décadas. Estas células no pueden replicarse más, pero tampoco desaparecen. En lugar de morir, se quedan en el cuerpo y secretan una variedad de moléculas inflamatorias que pueden dañar los tejidos circundantes. A pesar de que inicialmente juegan un papel protector, como en la prevención del cáncer o la cicatrización de heridas, su acumulación con el paso del tiempo favorece procesos inflamatorios crónicos que dañan órganos vitales.

Según el doctor James Kirkland de la Clínica Mayo, estas células son responsables de una serie de enfermedades degenerativas, como Alzheimer, diabetes tipo 2, fibrosis pulmonar y osteoartritis. Además, se han encontrado en concentraciones más altas en personas con enfermedades crónicas.

Le pude interesar: ¿Hace ejercicio regularmente? Así debe cuidar su cabello para protegerlo del sudor y el daño

“La acumulación de células senescentes está directamente relacionada con el envejecimiento y el deterioro de varios órganos” – Dr. James Kirkland, Clínica Mayo.

Le puede interesar: ¿Padeces asma? Mejora tu calidad de vida con estos consejos

PUBLICIDAD

¿Cómo afectan estas células al cuerpo?

Las células senescentes tienen un impacto en varios sistemas del cuerpo. En el cerebro, por ejemplo, su acumulación está asociada con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. Se ha descubierto que estas células contribuyen a la formación de enredos de proteína tau, una característica clave de la enfermedad.

En las articulaciones, estas células afectan el cartílago y los tejidos blandos, contribuyendo a la inflamación y rigidez, lo que puede desembocar en enfermedades como la osteoartritis.

En los órganos internos, como el hígado y los riñones, las células senescentes pueden reducir la función de estos órganos, afectando su capacidad de regenerarse e incluso favoreciendo la formación de tejido cicatricial, lo que complica tratamientos como los trasplantes.

Por otro lado, en los ojos, la exposición al sol puede inducir la senescencia de las células epiteliales del cristalino, aumentando el riesgo de desarrollar cataratas.

Le puede interesar: Los colombianos sienten que su economía personal no mejora

Impacto en enfermedades metabólicas

Las células senescentes también desempeñan un papel importante en las enfermedades metabólicas. Investigaciones han demostrado que su presencia en el tejido adiposo y en el intestino contribuye al desarrollo de enfermedades como la diabetes tipo 2 y la enfermedad hepática grasa no alcohólica. Estas condiciones son comunes en personas con sobrepeso y otros factores de riesgo metabólicos.

¿Existen soluciones para combatirlas?

El campo de la investigación está buscando activamente formas de eliminar o reducir la acumulación de células senescentes. Los fármacos senolíticos, que están diseñados para eliminar selectivamente estas células, han mostrado promesas en estudios preclínicos.

Por ejemplo, medicamentos como dasatinib, utilizado en quimioterapia, y flavonoides como quercetina y fisetina, presentes en frutas y verduras, han mostrado efectos beneficiosos en modelos animales, mejorando la salud pulmonar y reduciendo la inflamación.

Sin embargo, los expertos, incluido el Dr. Kirkland, advierten que el camino hacia la aplicación clínica de los senolíticos aún enfrenta desafíos. A pesar de los avances, la seguridad a largo plazo y los efectos adversos potenciales aún necesitan más investigación.

¿Cómo prevenir la acumulación de células senescentes?

Además de los fármacos, existen estrategias más accesibles para mitigar los efectos de las células senescentes. La actividad física regular ha demostrado ser una forma eficaz de reducir la acumulación de estas células. El ejercicio activa el sistema inmunológico, lo que favorece la eliminación de células dañinas.

Al mismo tiempo, factores de estilo de vida como el consumo moderado de alcohol, no fumar y protegerse de la exposición al sol también pueden ralentizar la formación de células senescentes.

Le puede interesar: ¿Cómo frenar la muerte de cerca de 219 colombianos al día por enfermedades cardiovasculares?

¿Cómo influyen en la salud cardiovascular?

En el ámbito cardiovascular, las células senescentes también tienen un impacto significativo. Contribuyen al desarrollo de enfermedades cardíacas como la aterosclerosis y la hipertensión, al promover la rigidez arterial y afectar la función vascular con el tiempo.

Los estudios sugieren que los senolíticos también podrían reducir la carga de estas células en el sistema cardiovascular, mejorando la función del corazón y los vasos sanguíneos.

Conclusión: Un enfoque hacia la longevidad y la salud

La investigación sobre las células senescentes abre nuevas puertas para comprender el envejecimiento y las enfermedades asociadas. Si bien aún queda mucho por hacer, las estrategias emergentes, tanto farmacológicas como basadas en el estilo de vida, ofrecen esperanzas para reducir los efectos del envejecimiento, mejorando la calidad de vida y la longevidad.

Si bien las células zombis pueden ser una parte natural del envejecimiento, su acumulación no tiene por qué ser un destino inevitable. Con avances en la medicina y cambios en los hábitos diarios, podemos ayudar a nuestro cuerpo a mantener su vitalidad por más tiempo.

PUBLICIDAD

Tags

Lo que debe saber


Lo Último