En las últimas semanas se ha desatado una enorme indignación por las versiones de distintos exparamilitares que salpican a la leyenda del ciclismo Luis Alberto ‘Lucho’ Herrera en un caso de homicidio múltiple de cuatro personas que eran vecinas de la finca del deportista: Gonzalo Guerrero Jiménez, Víctor Manuel Rodríguez Martínez, José del Carmen Rodríguez Martínez y Diuviseldo Torres Vega.
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A Herrera lo señalan de presuntamente haber pedido la ayuda de las Autodefensas Campesinas del Casanare, para arremeter contra sus vecinos. Una de las teorías es que habría querido apropiarse de las tierras, pero ya han aparecido nuevas versiones.
Pues bien, en la mañana de este viernes 2 de mayo un familiar de una de las víctimas le dio una entrevista al periodista Daniel Coronell en la emisora W Radio. Se trata de Óscar Rodríguez, un intendente de la Policía Nacional, quien es sobrino de Diuviseldo Torres.
Entre otras cosas, sostuvo que su tío era un trabajador en su finca. Incluso, advirtió que su abuelo trabajaba con el papá de Lucho Herrera.
Cuando Coronell le preguntó a Rodríguez si consideraba que el ciclista tenía el interés de comprar la finca de sus familiares, el intendente sostuvo que es algo difícil de probar y que no tiene certeza de eso.
No obstante, advirtió que el caso podría tener más que ver con el hecho de que la desaparecida guerrilla de las Farc secuestraron a Herrera y le pidieron 4.000 millones de pesos.
“En sus ansias de venganza, lo que hicieron fue traer ese grupo paramilitar desde los Llanos Orientales para que tomaran justicia por sus propias manos, culpando a personas totalmente inocentes. Culparon a mi tío y a las otras personas de pertenecer a las Farc, cuando nosotros mismos, toda la familia, somos desplazados de la guerrilla”, sostuvo Rodríguez.
Incluso advirtió que la familia de su abuelo huyó del departamento del Tolima por temor a que los reclutaran forzadamente.
¿Quiénes fueron los exparamilitares que salpicaron a Lucho Herrera?
Las versiones de los exparamilitares fueron conocidas por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y ameritaron el inicio de una investigación que aún está en curso.
Uno de los testigos que salpicó a Lucho Herrera fue Luis Fernando Gómez Flórez, alias Ojitos, quien advirtió que Lucho Herrera pidió a los paramilitares ponerse en contacto con alias Martín Llanos, cabecilla de las Autodefensas Campesinas del Casanare.
Entre tanto, la emisora W Radio también compartió el testimonio de otro exparamilitar llamado Héctor Díaz Gaitán, alias Camargo. Según él, se reunió con Lucho Herrera entre Fusagasugá y Silvania, Cundinamarca.
“Solo estuvo conmigo una vez en el asadero LA VARA de la vía de Fusa a Silvania y una vez que estuve en la Finca de él ubicada en la Aguadita a hablar con RAFAEL, para organizar los hechos de la desaparición de esa gente. Ellos tienen una galponera y vacas, es una finca a mano izquierda”, reza el testimonio compartido por W Eadio.