A través de sus canales de atención, la Policía Metropolitana de Ibagué, Tolima, recibió un alerta poco común por parte de la red de aliados de empresas de seguridad de la ciudad. Así lo señaló el mayor Pablo Restrepo, quien dio detalles de la captura de un presunto profanador de tumbas.
PUBLICIDAD
Los hechos se habrían presentado en el cementerio de San Bonifacio, adonde las autoridades acudieron después de recibir el reporte ciudadano de que un hombre estaba merodeando por el sector. Cuando llegaron, los uniformados en efecto encontraron a un hombre de 60 años que, al parecer, estaba cavando en las tumbas del cementerio.
Una vez lo detuvieron, los agentes de Policía encuentran que el hombre traía un “material óseo envuelto en trapo y papel, y con unos amarres”, según explicó el mayor Pablo Restrepo.
Así mismo, se conoció que el hombre fue conducido a un CAI, donde se legalizó su captura y más tarde fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de irrespeto a cadáveres.
“Es importante resaltar que, al ser sorprendido por nuestros hombres, se le indagó si tenía algún parentesco con la persona que allí se encontraba descansando en paz. Según la lápida, era una mujer, pero de forma clara, el capturado manifestó no conocer ni a la familia ni a la persona que allí se encuentra enterrada”, indicó, mientras tanto, el coronel Diego Edixson Mora Muñoz, actual comandante de la Policía Metropolitana de Ibagué, citado por la emisora Blu Radio.
Le encontraron muñecos de cera y una culebra
De acuerdo con el medio citado, el hombre no solo tenía entre sus posesiones amarres de huesos, sino que también le encontraron muñecos de cera con anillos y una culebra envuelta.
Además, dieron a conocer que el hombre había venido directamente desde el barrio María Paz, en el suroccidente de Bogotá, para realizar estos rituales que pretendía llevar a cabo en Ibagué.