Colombia se prepara para dar un gran paso hacia la reducción de la contaminación ambiental con la implementación de la Ley 2232 de 2022, que entrará en vigor el 7 de julio de 2024. Esta normativa prohíbe la producción y consumo de plásticos de un solo uso en el país, marcando un hito en la lucha contra la contaminación plástica.
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Productos Prohibidos
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, explicó que varios tipos de plásticos serán eliminados del mercado. Entre ellos se encuentran:
- Bolsas de punto de pago: Las bolsas utilizadas para embalar, cargar o transportar paquetes y mercancías, salvo aquellas que son reutilizables o de uso industrial.
- Bolsas para periódicos y publicidad: Las bolsas empleadas para embalar periódicos, revistas, publicidad y facturas serán eliminadas.
- Rollos de bolsas vacías en supermercados: Los rollos de bolsas utilizadas para empacar verduras, frutas y tubérculos en tiendas y supermercados también serán prohibidos.
- Mezcladores y pitillos para bebidas: Estos productos desaparecerán del mercado.
- Soportes plásticos para bombas de inflar y copitos de algodón: También se prohibirán estos soportes comúnmente usados para la limpieza de oídos.
Excepciones y condiciones
La ministra Muhamad aclaró que algunos productos plásticos podrán seguir usándose, siempre y cuando sean 100% reciclables y provengan de la cadena nacional de producción de plástico. “No se busca seguir importando estos elementos”, destacó, subrayando la importancia de utilizar plásticos reciclables de producción local para evitar “fugas de plástico al ambiente”.
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales será la entidad encargada de garantizar el cumplimiento de esta normativa. Este esfuerzo es parte de una estrategia más amplia para promover el reciclaje y una economía circular en Colombia.
La ministra Muhamad resaltó la importancia del reciclaje y la producción nacional en este proceso, afirmando que “Colombia tiene un proceso de manufactura de plástico a partir de las refinerías”. El objetivo es cerrar el ciclo de uso y producción, asegurando que los materiales se reutilicen y reciclen continuamente.
Con esta medida, Colombia se une a una creciente tendencia global hacia la eliminación de plásticos de un solo uso y la adopción de prácticas de producción y consumo más sostenibles. La política no solo busca mitigar el impacto ambiental inmediato, sino también fomentar una economía circular que beneficie tanto al medio ambiente como a la economía del país.