Las circunstancias en las cuales se dio la campaña presidencial del 2022 han generado todo tipo de especulaciones y conclusiones no solo a raíz de los cuestionamientos que ha sufrido el hoy presidente Gustavo Petro por la financiación de su candidatura, sino también por las declaraciones que ha dado el otro candidato presidencial que llegó a segunda vuelta, el exalcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández. De hecho, este último hizo unas afirmaciones que han generado gran revuelo en la opinión pública durante las últimas horas, pues declaró que su integridad se puso en riesgo durante el 2022.
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En una entrevista que le hizo el diario El Tiempo, Hernández reveló nuevos detalles de lo ocurrido durante la campaña presidencial. Entre otras cosas, manifestó su inconformidad con la victoria del actual primer mandatario Gustavo Petro.
El excandidato presidencial aseguró que su contraparte ganó las elecciones de forma “descarada”, aunque sostuvo que no se trató de un fraude electoral. “Otra gente decía que debía pelear el resultado electoral, eso también era una mentira, Petro sí ganó con votos, la trampa fue en la manera en que los consiguió, se alió con los partidos tradicionales que llegaron a recibir ministerios y que ahora se quejan, recibió dineros por debajo de la mesa, mire lo que dijo Iván Mordisco, el de las Farc. Mejor dicho, poco a poco el tiempo va revelando las verdades: pobre Colombia, se aliaron con el sistema para seguir en lo mismo”, sostuvo Hernández durante la entrevista.
Con esta declaración se refería a una supuesta afirmación que habría hecho el jefe de las disidencias de las Farc del Estado Mayor Central, quien habría señalado que ese grupo apoyó al presidente Petro en campaña. No obstante, esta afirmación ha sido cuestionada y no ha sido confirmada.
“Les pusieron una pistola en la cabeza”: Hernández sobre sus asesores en campaña
Pero quizás lo que causó más revuelo fue que Hernández advirtió que durante la campaña presidencial no solo estuvo en riesgo su integridad, sino también la de su familia.
“En la campaña presidencial amenazaron a mis asesores, les pusieron una pistola en la cabeza, me amenazaron a mí y a mis nietos, ahí preferí quedarme quieto. Me arrepiento, quizás, de no haberme metido unos 10 años antes en política, para haberles podido dar otros ‘rounds’ de pelea electoral”, contó el exmandatario.
También sealó que los procesos judiciales y disciplinarios en su contra fueron una forma de persecusión política. En efecto, no solo ha sido investigado por la Procuraduría, sino también por la Fiscalía. Incluso tiene una condena en su contra por un proceso penal.