Este miércoles 14 de febrero se celebra el Día de San Valentín en muchos países de Norteamérica y Europa. Una fecha ideal para expresar en palabras, detalles o momentos, todo el amor por esa persona especial.
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Y es que precisamente dentro de los regalos, se encuentran las flores como símbolo de gratitud y cariño, generando así una gran demanda para los floricultores de Colombia, el segundo país más exportador de flores y bouquets en el mundo.
Según cifras de la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores (Asocolflores), esa tradición representa para el país entre 15 % y 20 % de las exportaciones totales del año.
Tan solo entre enero y febrero de 2023, se enviaron 52 mil toneladas de flor cortada, representando un decrecimiento frente al mismo periodo del 2022 de 10 %, respecto a datos del DANE.
Durante esta celebración, de las cerca de 60 especies con que cuenta nuestro país, la más especie más exportada es la rosa roja, la cual representa cerca del 90 % del total enviado. Sin embargo, también viajan durante esta fecha; claveles, alstroemerias, crisantemos, hortensias, lirios y muchas otras, de las cerca de 60 especies con que cuenta nuestro país.
“Las flores colombianas son apetecidas en el mundo por su calidad y diversidad, pero sobre todo la confiabilidad en la proveeduría. Los clientes que son mayoristas tienen la garantía que les llega a tiempo y lo que han ordenado”, aseguró Augusto Solano, presidente de Asocolflores, en entrevista con PUBLIMETRO.
Sobre el impacto del Fenómeno de El Niño, donde el IDEAM espera que se extienda hasta el mes de abril con condiciones de sequía menos extremas, Solano dijo que “hasta ahora hemos logrado sortear la variabilidad del clima. Afortunadamente, hacemos un uso racional del agua con el riego por goteo y contamos con algunos reservorios que duren. Pero nos preocupa que las plagas se exacerben”.
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La cadena logística: una de las claves para tener éxito en la exportación
Respecto al total de toneladas de flores enviadas el año pasado, el 92 % fueron transportadas por vía aérea desde los aeropuertos El Dorado (83%) y el José María Córdoba de Rio Negro (17%). El 8% restante (4.265 toneladas), fue enviado por vía marítima: Santa Marta (70%), Buenaventura (13%), Cartagena (13%), Barranquilla (3%) y Turbo (1%).
Precisamente en El Dorado, al ser uno de los Aeropuertos más importantes a nivel mundial, PUBLIMETRO conoció de primera mano el proceso de exportación de uno de los más de 700 millones de tallos que viajó a algunos de los 100 países, donde Estados Unidos es el principal destino al concentrar el 85 % de los envíos, seguido de Canadá, Japón, España y Reino Unido.
Debido a que buena parte del éxito de la exportación de flores depende de la cadena logística, Asocolflores puso en marcha un dispositivo de seguridad y de coordinación con todas las autoridades y los diferentes agentes de la cadena logística (aeropuertos, puertos, agencias de carga y aerolíneas, entre otros), para asegurar la movilidad, el flujo de la carga y prevenir ilícitos.
Así las cosas, la DIAN es la entidad encargada de verificar el cumplimiento de requisitos para aquellas mercancías que entren o salgan del país.
Por su parte, el Instituto Colombiano Agropecuario, tiene la tarea de aprobar los documentos presentados por el exportador e inspeccionar en el laboratorio el 5 % o 10 % de la carga que llevan para verificar el empaque y la especie, con el fin de descartar alguna plaga y posteriormente emitir un certificado fitosanitario.
“Desde mediados de diciembre de 2023, desde nuestras áreas técnicas generamos un plan de acción con el fin de estar a la altura de este gran reto de la floricultura colombiana para inspeccionar millones de tallos que salen a cerca de 100 mercados internacionales, de esta manera nos articuláramos con el gremio, entidades y empresas para cumplirle al país exportador y generar bienestar al campo colombiano”, señaló Juan Fernando Roa, gerente general del ICA.
Pero allí no acaba el proceso. Ahora en un gigantesco cuarto frío adecuado entre 2 a 8 grados centígrados para mantener la cadena de frío, las flores pasan por otro control de seguridad que incluye escáner y el rastreo de caninos entrenados en antidrogas.
“El año pasado y este 2024 no hemos recibido ninguna información que a destinos críticos u otro, haya llegado alguna contaminación de clorhidrato de cocaína dentro de las flores”, aseguró la Policía Antinarcóticos.
Una vez se verifica que las cajas de flores están legalmente empacadas, son llevadas hasta otro punto donde 60 toneladas esperan ser embarcadas en forma de planchas o pallets aéreos, y así volar en uno de los 12 aviones de carga o pasajeros que diariamente están operando para esta importante temporada.
