La FLIP presentó el informe La radio de la fuerza pública: un monopolio que debilita la democracia, por medio del cual evidencia que durante las últimas décadas se ha convertido en el sistema radial más poderoso del mundo. Asegura que las radios militares y policiales tienen una capacidad que supera a cualquier radio comercial.
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Además, aseguró que “representan casi la mitad de las radios de interés público, lo que constituye un monopolio que domina el espectro radial en detrimento de radios como la comunitaria. Las lógicas del conflicto armado que hicieron posible este aparato comunicativo que hoy cuenta con 150 estaciones ubicadas de manera estratégica para tener cobertura en cada rincón del territorio han cambiado. Por eso, resulta impostergable el debate sobre su pertinencia, su futuro y cuáles son las consideraciones que deben tenerse en cuenta para transformar este modelo radial”.
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La radio para ganar la guerra en Colombia
El informe dice que la radio tiene la capacidad de llegar a cualquier rincón del país y “fue considerada por el Estado como una oportunidad para ganar la guerra”.
La expansión de las radios de la fuerza pública ha representado un desequilibrio, según la FLIP, ya que ha cercado voces disidentes y ha impedido una democratización efectiva del espectro electromagnético.
“En un escenario de transición en el que el Gobierno del presidente Gustavo Petro se ha comprometido a darle continuidad al Acuerdo Final para la Paz entre el Estado y la guerrilla de las FARC y ha resuelto abrir el espacio para un diálogo con las disidencias, el ELN y otros grupos ilegales en el marco de lo que ha llamado “la paz total” es imperativo revisar el papel del sistema radial de la fuerza pública y advertir el peligro que supone su robustecimiento en una democracia”, indicó la FLIP.
El informe logra evidenciar el papel de las radios de la fuerza pública en la distribución del espectro electromagnético, cómo ha sido su uso en medio de la guerra y como herramienta de propaganda, con lo que se han afectado los derechos de los oyentes a tener acceso a una radio diversa, democrática y de calidad.
