Ante la desaparición del menor de seis años, Maximiliano Cano, desde el pasado 21 de septiembre en zona rural de Remedios, Antioquia, el 20 de octubre fueron capturados seis personas en los municipios de Segovia y Medellín.
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Dentro de los presuntos implicados, fueron aprehendidos su mamá, Sandra Patricia Caro Pérez; su padrastro, Fabio Andrés Carmona Ramírez; su abuela, Dámaris Estela Pérez Escalante; esposo; y dos personas cercanas a la familia: ‘La discípula’ y ‘El Meditador’.
Cuatro días después se desarrolló la audiencia de imputación de cargos de manera virtual y reservada. Siendo las 7:00pm de la noche, todos se declararon inocentes de los delitos endilgados por la Fiscalía, ante el Juez Primero Promiscuo Municipal de Cisneros, Antioquia.
Carmona Ramírez, alias “El Líder” (padrastro del menor) y Caro Pérez, alias “La Cacica” (madre del niño), son acusados por desaparición forzada agravada y tortura; y desaparición forzada agravada a título de autora y tortura a título de cómplice, respectivamente.
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Su abogado defensor solicitó un habeas corpus para que los dejen en libertad, argumentando que las audiencias de legalización de captura no fueron consecutivas y apenas se retomaron este lunes.
Por otra parte, Robinson Smith, alias “Orejas” y Susana Ceballos, alias “La sumisa”, son inculpados por los delitos de desaparición forzada agravada y tortura a título de cómplice. Mientras que, Damaris Pérez, la abuela, por el delito de tortura en calidad de cómplice, al igual que su compañero sentimental, Fabian Alberto Monsalve, alias “El Meditador”.
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Este martes, se desarrollaría las audiencias de medida de aseguramiento, donde un juez de control de garantías, determinará si los envía a la cárcel o les dicta medida de aseguramiento domiciliaria. O por el contrario, a algunos los deja en libertad y continúan vinculados al proceso.
‘Los carneros’: la secta satánica presunta responsable de la desaparición de Maxy
De acuerdo con la información preliminar de las autoridades, una secta satánica conocida como ‘Los carneros’, liderada por el padrastro del niño, habría sido la responsable de su desaparición.
Según el reporte de la Policía, alias ‘Orejas’, habría convencido al resto de la familia que Maximiliano estaba poseído por un espíritu y por eso había que sacrificarlo.
Al parecer, esta secta satánica hacía este tipo de aterradoras actividades con el fin de hallar guacas de oro o entierros en esta zona del país.
La población en el corregimiento La Cruzada, barrio La Primavera, sector Piedra del Diablo, en los límites con Segovia, lugar donde desapareció el niño luego de que su mamá lo enviara a la tienda a las 7:00 a.m, clama justicia y mantiene la esperanza de que esté vivo.
