361 indígenas Embera Chamí, Katio y Dobidá que se encontraban en el parque La Florida en Bogotá retornaron esta madrugada del miércoles hacia la vereda Dokabú en Pueblo Rico, Risaralda; y Carmen de Atrato y Bagadó en el Chocó.
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La Unidad para las Víctimas, la Secretaría de Gobierno y la Alta Consejería de Paz, Víctimas y Reconciliación coordinaron el tercer traslado que se llevó a cabo desde la UPI La Florida.
Desde el 1 diciembre de 2021, 460 indígenas han retornado a sus territorios ancestrales y 19 días después lo hicieron alrededor de 800 personas. Es decir que a la fecha son más de 1.600 indígenas que han regresado a sus resguardos.
“El retorno es la manera mediante la cual podemos avanzar en la reparación integral a los pueblos. Sus prácticas culturales, sus proyectos de vida. Es allí donde pueden desarrollarse de manera integral en clave de garantías de no repetición. Esperamos que el gobierno nacional, que asumió su compromiso con los líderes y lideresas de la población embera cumpla con garantizar las condiciones dignas en el territorio”, aseguró Vladimir Rodríguez, alto consejero de paz.
Quiénes allí se encontraba, manifestaron que estaban “felices de regresar al territorio. En el Parque Nacional sufre mucho el compañero, entonces que vengan para acá porque la casa es buena y hay donde dormir”.
El Distrito hizo un llamado a la comunidad que se encuentra asentada en el Parque Nacional “para que acepte su traslado a la UPI de La Florida, donde contarán con mejores condiciones de vida para ellos y sus hijos en su estancia en la ciudad”.
