Karen Liseth Vaquiro es la esposa de uno de los asesores de Presidencia y ha ejecutado contratos con el estado por más de 1000 millones de pesos. Pero, según María Paula Correa, ella “no tenía conocimiento” sobre esto.
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Andrés Mauricio Mayorquín es el esposo de Vaquiro, quien después de trabajar como profesor por cinco años, ser contratista y miembro de UTL en el Congreso, el abogado bogotano se convirtió en asesor en Consejería para Asuntos Políticos.
Sin embargo, en septiembre del 2021 el Gobierno eliminó esa y otras dos consejerías, por lo que Mayorquín ganó poder y pasó a ser los ojos y los oídos de María Paula Correa en el Congreso, en donde tiene como labor hacer seguimiento del proceso legislativo, del comportamiento de los congresistas y del curso de los proyectos que son de interés para el Gobierno.
Según la emisora, esta es una labor que desempeña con total idoneidad, ya que tiene la preparación académica y su trayectoria le permite conocer los secretos y los pasillos del Congreso.
El asunto que llama la atención, es que Mayorquín está casado con Karen Liseth Vaquiro, una economista caqueteña, quien desde enero del 2020, solo tres meses después de que su esposo llegara a la Presidencia, se convirtió en contratista del Estado, de más de 15 entidades.
La experiencia que demostró Vaquiro es haber sido durante 20 meses gerente de oficina en el Banco de Bogotá, en donde ganaba 3.600.000 pesos; y siete meses en Link Consultores SAS, una empresa en la que ella y su esposo son fundadores y representantes legales.
Es entonces donde se inicia las preguntas y dudas sobre cómo una joven economista, en tan corto tiempo, logró firmar desde enero de 2020, 24 contratos con el Estado, de los cuales 22 han sido por contratación directa y dos por Contratación de Régimen Especial. En total los contratos suman 1,245 millones de pesos, por lo que en promedio pasó a ganar 65 millones mensuales.
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La respuesta de Presidencia
A través de un comunicado, Correa dijo:
“Con respecto a la información sobre los contratos que tuvo su cónyuge (Karen Liseth Vaquiro Cuéllar) durante los años 2020 y 2021, me permito informar que no tenía conocimiento sobre ninguno de ellos y en ningún momento me pidió (Andrés Mauricio Mayorquín) interceder ante ninguna entidad para contrato alguno”.
Y agregó:
“Confío en la buena fe de quienes trabajan dentro de mi equipo y rechazo de manera contundente cualquier conducta que falte a los más altos estándares éticos, que debemos tener todos los funcionarios públicos. Cero tolerancia con quien utilice su cargo para favorecerse”.