Bogotá arrasó en el V Concurso Nacional de Programación para Colegios 2021.
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El colegio Jorge Gaitán Cortes y la Institución Educativa Cirat ocuparon el primer y segundo puesto, respectivamente. Con esta edición, celebrada el pasado 12 de noviembre, el Concurso cumple cinco años.
Para esta ocasión, la actividad instaba a los estudiantes a desarrollar un producto tecnológico que diera solución a alguno de los siguientes temas: consumo de agua, energías alternativas, transporte-movilidad y convivencia ciudadana.
Estudiantes bogotanos ganan Concurso Nacional de Programación para Colegios 2021
Uno de los propósitos es orientar a los estudiantes a involucrarse en las necesidades de su comunidad y desarrollar competencias transversales como trabajo en equipo, liderazgo, solución creativa de problemas, gestión efectiva del tiempo y otras.
Se trata de una iniciativa de Fedesoft (Federación Colombiana de la Industria del Software y Tecnologías Informáticas Relacionadas) y Redis (Red de Programas de Ingeniería de Sistemas y Afines) con patrocinio de Iungo, Fundación Universitaria Católica del Norte, Slang, Keepcoding y Unaula.
“Las cifras de este año superaron las expectativas, pues se registraron 353 colegios para la fase de formación, 74 ideas de proyectos, 68 mentores (empresarios, docentes y estudiantes de últimos semestres de ingeniería de sistemas) y 86 profesores de los colegios que acompañaron el proceso de desarrollo de los proyectos”, señaló Ximena Duque, presidenta ejecutiva de Fedesoft.
Según explicó, actualmente, existe un déficit de entre 68.000 a 70.000 perfiles digitales en la industria de desarrollo de software, aplicaciones y videojuegos, por lo cual, es fundamental incentivar el aprendizaje de herramientas tecnológicas y lenguajes de programación entre los jóvenes para el beneficio y el crecimiento del sector tecnológico del país.
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Intelligent Greenhouse
El proyecto Intelligent Greenhouse del colegio Jorge Gaitán Cortes fue el ganador del concurso.
Los integrantes del equipo diseñaron un producto de base tecnológica que permite automatizar y generar huertas controladas para el autoconsumo.
“Competimos con más de 300 colegios, fue un reto bastante amplio. Lo que se quiere hacer con la granja es que se genere todo un sistema automatizado, pero que baje la huella de carbono, el cual se pueda llevar a cabo en casas o lotes dentro de la agricultura urbana”, explicó a PUBLIMETRO Wilson Pérez Correa, docente de la Secretaría de Educación y las academias SED _CISCO y líder del proyecto.
El equipo está conformado por tres estudiantes, todos de grado 11. Andrés Felipe, uno de ellos, añadió que el propósito es mejorar los procesos agrícolas y hacer esa área más sostenible: “Nuestro proyecto controla distintas variables, como la temperatura, humedad del aire, déficit de calor, humedad del suelo, nivel de dióxido de carbono, entre otros aspectos que la hace más sostenible. Queríamos reducir la huella de carbono en los invernaderos”.
Explicó que el invernadero posee varios sensores. Los sensores de humedad del suelo, por ejemplo, controlan el nivel de humedad y cuando la tierra está seca, se va a activa el riego; el sensor de temperatura, por su parte, activa la ventilación cuando el clima lo requiere. Y son muchos más los aspectos de este proyecto, que con el tiempo se espera implementar a gran escala.
Smart Ámbar
El segundo galardón también se lo llevó la capital con el proyecto Smart Ámbar de la Institución Educativa Cirat, donde los estudiantes lograron diseñar un proyecto que monitorea y controla el consumo eléctrico doméstico a través de un dispositivo en tiempo real.
“Somos un club de informática y robótica, una iniciativa privada. Recibimos alumnos de varias instituciones. En el equipo nos acompañan alumnos de octavo y noveno de los colegios San Patricio, Italiano, Agustiniano Norte y otros . También nos acompañan docentes de las áreas de ingeniería mecánica y física”, mencionó a PUBLIMETRO Marcela Torres, directora del club de informática y robótica de Cirat.
A renglón seguido, Emilio, uno de los estudiantes involucrados, explicó el alcance de la creación: “El proyecto que realizamos es una Inteligencia Artificial (IA), que se perfecciona cada vez más. Lo que hicimos fue desarrollar una aplicación móvil que ahorra energía eléctrica en tomacorrientes de la casa. Por otro lado, la aplicación se conecta con una base de datos que a su vez se conecta con la IA; basados en las acciones del usuario, básicamente va a aprender de sus costumbres y hábitos para ahorrar energía de una manera autónoma”.
Mencionó que el invento se aplicó al caso concreto de un bombillo, sin embargo, se puede implementar en cualquier hogar.