Un sindicalista que trabajaba en una empresa contratista de Ecopetrol falleció este domingo, después de recibir varios disparos hace un mes cuando salía de su puesto de trabajo, denunció este lunes la Unión Sindical Obrera (USO).
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Robinson Jiménez, que era presidente de la Asociación de Taladreros de Santander y afiliado a USO, recibió varios disparos cuando salía de su puesto de trabajo en el municipio de Puerto Wilches, en la zona del Magdalena Medio (norte), donde hay mucha presencia de petroleras y yacimientos.
El ataque se produjo durante la jornada de protesta regional del 6 de octubre, donde sindicalistas y trabajadores de Cantagallo y Puerto Wilches se manifestaban contra la estatal Ecopetrol, ante sus intentos de “privatización disfrazada y precarización laboral”, según calificó el sindicato.
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“Las heridas producidas fueron muy graves, especialmente en el cráneo, por eso después de ser valorado y estabilizado en el hospital de Puerto Wilches fue trasladado hacia la ciudad de Bucaramanga en donde la noche del domingo falleció”, dijo USO en un comunicado.
La central sindical pidió que se investigue la muerte del trabajador y se encuentre a los autores intelectuales y material “que hoy se convierte en homicidio y sean juzgados y condenados”.
“Esta violencia contra líderes sindicales y sociales debe detenerse”, pidió USO en el comunicado.
El asesinato de líderes sociales -entre los que se encuentran sindicalistas y activistas por los derechos laborales- se ha disparado desde el acuerdo de paz, así como las organizaciones denuncian el aumento de las judicializaciones a trabajadores, sobre todo en zonas con presencia de petróleo y grandes compañías.
Según la ONG Indepaz, este año han sido asesinados 149 líderes y defensores de derechos humanos, que hacen que el número de asesinatos desde la firma del acuerdo de paz en 2016 ascienda a 1.264.