La psicóloga y escritora española Ana Pérez, conocida en redes sociales como Naci Dramática, estuvo en Medellín y habló con PUBLIMETRO COLOMBIA sobre su tercer libro Tiempo para vivir, de Penguin Random House Group, un manual práctico con 100 herramientas para gestionar mejor el trabajo, el ocio y el descanso.
El tiempo es lo que más nos preocupa a todos como seres humanos, ¿qué significa el tiempo para usted?
El tiempo es el recurso que tenemos más limitado en nuestra vida porque, por ejemplo, el dinero es un recurso que si se pierde luego se puede recuperar. Las amistades, familiares, relaciones en general, puede que haya una época que tengamos menos relación con alguien, pero luego la podemos recuperar. Hay como muchos recursos en esta vida que se pueden recuperar de alguna forma, pero el tiempo cuando se va, ya no vuelve. Entonces, es como si todos los días, te dieran 1440 dólares, por ejemplo, y te dicen que al final del día ya no vas a poder utilizarlos para nada y que van a desaparecer de tu cuenta. En este caso tenemos 1440 minutos. Entonces, es como qué vas a hacer con esos 1440 minutos que hoy tienes.
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¿Cómo fue que surgió ese análisis?
Creo que todos vamos de aquí para allá con muchas tareas, de una obligación a otra, y que luego, al final, muchas veces no aprovechamos bien el tiempo cuando estamos haciendo nuestro trabajo o cuando estamos estudiando, y sentimos que los días se nos van. Realmente, tampoco a lo mejor llegamos a todo lo que queremos. Entonces, fue como una mezcla entre lo que veía en la gente de mi alrededor, en pacientes, en mí misma. La gestión del tiempo es un problema que tienen muchísimas personas, y cada vez más, porque tenemos muchísimas distracciones y creo que es un tema del que es necesario hablar y también de empezar a valorar el tiempo de otra forma, porque realmente creo que no somos conscientes del valor que tiene cada minuto, cada día, porque, al final, la vida va pasando y el tiempo no vuelve.
Las nuevas generaciones tienen ese gran tema con las redes sociales y la permanencia durante muchas horas conectados scrolleando, ¿también eso hizo parte del análisis?
Sí, por supuesto. De hecho, uno de los mayores distractores a día de hoy es el celular y las redes sociales. Al final, las redes sociales son una herramienta que, si se utiliza bien y con conciencia, pues pueden ser maravillosas; pero el problema es que hemos perdido la capacidad de poner límites. El celular siempre lo tenemos al lado, ocupa todos nuestros espacios del día, nos distrae. Evidentemente, cuando estás enfocado a una tarea y tienes el móvil cerca, si miras cada notificación, no solo pierdes el tiempo que dedicaste a esa interrupción, sino también el tiempo que tardas en volver a concentrarte. Es decir, no regresas al mismo punto en el que estabas, tienes que pensar por dónde ibas. Entonces, obviamente, una tarea se prolonga mucho más si tienes al lado distracciones en general y el móvil es una de las más frecuentes al día de hoy.
¿Cómo llegó a la técnica de los 2 minutos que hace parte de las herramientas propuestas en su libro?
Esa es una técnica de David Allen y es una herramienta genial porque, siempre tenemos muchas cosas en la cabeza. Entonces, lo último que necesitamos es tener más. Así que esa técnica propone que si una tarea te da para hacerla en 2 minutos, la hagas. Son cosas pequeñas que se tardaría muy poco en hacer. Pues esas ir haciéndolas conforme vayan apareciendo en el día.
Dentro de las opciones que propone en el libro también está la importancia de planear, de sacar nota de cada una de las actividades que se hacen y está la herramienta del vaso...
La herramienta de los vasos del tiempo a mí me gusta mucho porque te hace evaluar cómo está tu vida a día de hoy. Básicamente, consiste en que tú pongas 24 papeles durante 1 día, cada hora apuntas en un papel qué has hecho. Y vas poniendo diferentes vasos por ejemplo: trabajo, celular, lectura, amigos, videojuegos. Así se van llenando los diferentes vasos. Y al final del día ves, cómo están los vasos de llenos o de vacíos. Es una representación visual muy buena de reflexión para empezar a valorar el tiempo.
¿Cree que el libro permite que las personas tengan esa puerta abierta para acercarse más a la psicología?
Sí, yo creo que gracias a los libros, no solo el mío, sino en general a los libros de psicología, las personas, a lo mejor, empiezan y es como un acompañamiento más. Se leen el libro y, gracias a eso, a lo mejor, identifican que tienen algún problema, algún malestar, alguna preocupación, y le ponen nombre, lo normalizan. También, es una primera puerta para ir al psicólogo. A veces, incluso, hay gente que me ha dicho que gracias a mi libro, por ejemplo, ha conseguido ir a terapia, y eso para mí, es lo más bonito que me pueden decir porque realmente, es mi objetivo. No es que mi libro ni ningún otro sustituya la terapia psicológica, que es un mensaje que quiero decir; pero sí, que me parece muy bonito que alguien me diga que fue su primer acercamiento a la psicología, gracias a mis libros.

