Cada año, más de 400 adultos mayores son abandonados en Colombia, lo que se suma a que en el 2021, el 24 % de ellos vivía en pobreza monetaria y el 45 % se consideraba pobre, según HelpAge International y la Pontificia Universidad Javeriana. Sin embargo, contrario a lo que se esperaría, el panorama se agrava con el crecimiento acelerado de la población mayor.
En 1985 solo 7 de cada 100 colombianos tenían más de 60 años, hoy la cifra asciende a 15, y para 2070 se estima que uno de cada tres colombianos tendrá más de 75 años, de acuerdo con proyecciones de Corficolombiana.
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Colombianos están envejeciendo a gran velocidad
“Colombia envejece rápido, pero no estamos creciendo al mismo ritmo en infraestructura social ni en modelos de cuidado para la vejez. Si no nos preparamos, el abandono y la soledad serán el principal problema de salud pública de nuestro país en pocos años”, dijo Sebastián Jaramillo, líder del Centro de Bienestar del Anciano San José de Marinilla, Antioquia.
Justamente ese centro de atención, que fue fundado en 1943, ha atendido a cientos de adultos mayores en situación de vulnerabilidad, ofreciéndoles acompañamiento médico, psicosocial, espiritual y actividades recreativas.
Actualmente acoge a cerca de 100 personas y busca abrir una segunda sede en la vía Marinilla–El Peñol, junto al convento La Visitación, con capacidad para albergar a 150 adultos mayores adicionales, especialmente aquellos en condición de discapacidad, sin hogar o sin recursos.
Además, el centro actualmente desarrolla el programa Centro de Vida, que brinda acompañamiento diurno a personas mayores sin cuidadores, con transporte desde sus hogares, alimentación completa, actividades lúdicas y seguimiento en salud.
“Más que un edificio, estamos construyendo una manera distinta de entender la vejez como una etapa que merece afecto, dignidad y presencia de toda la sociedad y el Estado”, agregó Jaramillo.