Durante el fin de semana, todas las estaciones de monitoreo de la calidad del aire en el Valle de Aburrá estuvieron en amarillo, que significa que se están superando los 30 microgramos por metro cúbico de PM2.5, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, es nocivo para la salud, sin embargo, para los protocolos del Área Metropolitana del Valle de Aburrá es aceptable, sin embargo, niños, adultos mayores, mujeres embarazadas deben abstenerse de realizar actividades al aire libre.
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El Siata, reportó entre sábado y domingo que varias estaciones tenían grandes concentraciones de PM2.5, lo que produjo el deterioro de las estaciones poblacionales de calidad del aire, que pasaron a naranja.
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Se deteriora la calidad del aire en Medellín
Según indicó El Colombiano, el Siata explicó que los sensores de Black Carbon y Carbono Total de la estación Tráfico Centro, indicaron que el fin de semana se incrementaron los indicadores por la quema de biomasa, probablemente debido a fuentes externas, lo que coincide con los incrementos del número de puntos calientes que estarían asociados con incendios para la última semana en la región nororiental de Colombia, según las mediciones satelitales de la Nasa.
El Valle de Aburrá, generalmente, reporta un incremento en los índices de mala calidad del aire entre los meses de febrero y abril, por las condiciones meteorológicas y los efectos de fuentes externas y dinámicas de emisión de contaminantes a nivel local.
El investigador en cambio climático y energías renovables, Santiago Ortega, le dijo a El Colombiano que: “La administración de Daniel Quintero ignoró y subestimó sistemáticamente los temas de calidad de aire en Medellín. Con la falta de decisión de estos días pareciera que la de Federico Gutiérrez caerá en lo mismo. ¿Cuántas muertes por calidad del aire se pueden asumir?”, cuestionó.
