Ya se completaron 12 días desde el inicio del paro minero en Antioquia, que ha generado afectación en la subregión del San Jorge y el Bajo Cauca antioqueño y temor entre la población por el actuar criminal del Clan del Golfo.
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El fin de semana, en Tarazá, hombres quemaron el peaje que va hacia Cáceres y Caucasia, complicando el orden público en Antioquia. Además, cortaron árboles y los dejaron en la mitad de la vía para impedir el paso vehicular.
Por eso la Unidad Nacional de Diálogo y Mantenimiento del Orden llegó desde el domingo a la vía Caucasia - Cáceres con el objetivo de acompañar a los usuarios viales y garantizar el abastecimiento. También hicieron presencia miembros de la Policía en otros peajes del departamento y se realizaron caravanas para garantizar la seguridad a los ciudadanos.
“Todas las vías están bajo control. Solo falta una carretera en donde aún se están removiendo árboles que eran usados para bloquear”, dijo el presidente en las primeras horas de este lunes.
Por lo que, según estimaciones del Gobierno, los antioqueños podrán circular por las vías con total normalidad después de un fin de semana lleno de hechos violentos.
Paro minero
El presidente Gustavo Petro aseguró que si el Clan del Golfo está detrás de los bloqueos y de los hechos violentos ocurridos en el paro minero en Antioquia eso indicaría que ese grupo “no tiene voluntad de paz”.
“Si el Clan del Golfo está detrás del paro, como muchos de los indicios así lo demuestran, hay que decirlo: no tiene voluntad de paz”, dijo el mandatario luego de un Consejo de Seguridad realizado en Montelíbano, Córdoba.
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Allí, Petro, varios de sus ministros y autoridades de la región analizaron la situación de orden público a raíz de los hechos violentos ocurridos en las últimas horas en Antioquia en donde fueron quemadas dos ambulancias en medio de un paro minero que completó 12 días.
El presidente agregó que ninguna organización puede acercarse al Gobierno a una negociación con la justicia para un desmantelamiento pacífico “si en su cabeza lo que tiene es defender a ultranza las economías ilegales” como la minería o el narcotráfico.
“La paz no es para mantener el narcotráfico, la paz es para desmantelar el narcotráfico y la minería ilegal y toda agrupación que quiera acercarse al Estado y en este caso al poder Judicial debe tener eso absolutamente claro. Ni el Gobierno, ni el Estado son para engañar”, dijo.
Durante estos los 12 días del paro minero han ocurrido violaciones al derecho internacional humanitario.
Además, los habitantes de varios municipios de Antioquia ha estado confinados, sin provisiones, medicinas e incluso, hubo un intento de atacar a un acueducto que abastece de agua a una zona afectada por el paro minero.
Eso indica, según Petro, que “más que un ataque al Gobierno es un ataque contra la población” del nordeste de Antioquia y de Córdoba.
Diálogo con mineros
El Gobierno afirmó que volverá a dialogar con los mineros de Antioquia cuando “cesen los hechos de violencia” y se supere el desabastecimiento de alimentos causado por las manifestaciones que afectan a más de 250.000 personas.
Así lo aseguró la Presidencia en un comunicado en el que señaló que el diálogo “sólo se reabrirá una vez cesen los hechos de violencia, tengamos normalización en el territorio; se supere el desabastecimiento y la población pueda contar con alimentos, medicinas y el pleno funcionamiento de hospitales, colegios y centros de atención de la niñez”.
Además, el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, dijo que “como sociedad debemos rechazar enérgicamente, unidos, este gravísimo y cobarde atentado contra la Misión Médica que tanto le sirve a nuestra gente. ¡Basta ya!”, refiriéndose a la quema durante el fin de semana de ambulancias.
