El turismo mundial atraviesa una transformación profunda: hoy, los viajeros buscan algo más que cubrir kilómetros o llenar itinerarios. La nueva tendencia para 2026 es viajar con propósito, un enfoque que combina calma, introspección y experiencias significativas.
Este tipo de viaje trasciende lo geográfico. Su valor principal está en la conexión con la naturaleza, el bienestar emocional, el aprendizaje de culturas locales y el desarrollo personal del viajero.
Preferencias del viajero colombiano: naturaleza, bienestar y autenticidad
Según el más reciente Reporte de Caracterización General del Mercado – Colombia del Instituto Costarricense de Turismo, los intereses del viajero colombiano están cambiando y se alinean con experiencias más humanas, sostenibles y transformadoras.
En 2024, las actividades más buscadas fueron:
- Sol y playa: 71,4 %
- Gastronomía local: 65,3 %
- Observación de flora y fauna: 40,8 %
A estas se suma un crecimiento notable en experiencias que despiertan un sentido más profundo:
- Visita a volcanes: 42,9 %, una de las actividades de mayor aumento respecto a 2023.
- Recorridos culturales que permiten interactuar con comunidades y aprender de su cotidianidad.
Estas cifras demuestran que el turista colombiano ya no busca únicamente entretenimiento, sino vivencias que ofrezcan calma, conexión genuina con el entorno y un propósito claro durante cada viaje.
En este contexto, Costa Rica emerge como uno de los destinos más coherentes para este nuevo tipo de viajero. Su compromiso con la conservación y el turismo sostenible refleja exactamente lo que el turista de 2026 está buscando.
Con solo el 0,03 % de la superficie terrestre del planeta, Costa Rica alberga:
- El 6,5 % de la biodiversidad mundial,
- Más del 25 % de su territorio protegido,
- 153 áreas silvestres que resguardan ecosistemas únicos.
Su riqueza natural y su filosofía “Pura Vida” convierten al país en un escenario ideal para quienes desean un viaje significativo.
Heilyn James, líder de los mercados de México y Sudamérica del Instituto Costarricense de Turismo, asegura:
“Costa Rica no ofrece simplemente un lugar para visitar, brinda un espacio para descubrir un ‘por qué’. Su abundante naturaleza, la calidez de sus comunidades y su filosofía ‘Pura Vida’ invitan al viajero a conectar con lo esencial, reflexionar sobre su propósito y aportar al entorno”.
Las tres dimensiones de un viaje con propósito
El concepto se sostiene en tres pilares fundamentales:
1. Conexión con la naturaleza
Entornos verdes y biodiversos aportan bienestar psicológico y físico. La presencia de bosques, ríos, volcanes y playas ayuda a reducir el estrés y mejora la sensación general de vitalidad.
2. Inmersión en comunidades locales
Interactuar con culturas auténticas, aprender oficios tradicionales y disfrutar de la gastronomía regional permite al viajero generar un impacto positivo y sentirse parte activa del lugar que visita.
3. Intención personal
Un viaje con propósito invita a pausar, reflexionar, reordenar prioridades y descubrir nuevos aspectos internos que la rutina no permite ver.
Estas dimensiones redefinen por completo la forma de viajar: ya no se trata solo de llegar a un nuevo sitio, sino de vivir una experiencia transformadora.
2026: el año para elegir viajes conscientes y sostenibles
De cara al próximo año, esta tendencia invita a los viajeros a:
- Preferir alojamientos sostenibles,
- Optar por rutas que protejan la biodiversidad,
- Conocer comunidades rurales y apoyar sus economías,
- Disfrutar de una gastronomía local responsable,
- Priorizar actividades que fomenten el bienestar y la conexión personal.
El viaje con propósito se perfila como el camino para transformar cada desplazamiento en una experiencia auténtica, consciente y valiosa para el viajero y el entorno.

