El jengibre y la hierbabuena son ingredientes naturales muy conocidos por sus componentes y beneficios.
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La hierbabuena es una planta aromática, pero el aceite que desprenden sus hojas no solo aportan aroma a las preparaciones, también mucho sabor. Además contiene calcio, fósforo, potasio, hierro, vitamina A y vitamina C.
Por su parte, el jengibre es una raíz que se da en climas tropicales y se usa mucho para prevenir enfermedades y ayudar a procesar la digestión. Tiene propiedades antioxidantes, antiespasmódicas, descongestionantes y analgésicas.
Al combinar la hierbabuena con el jengibre en una bebida, se obtiene un té que además de relajar el cuerpo, también contribuye con la pérdida de peso.
¿Cómo se prepara el té de hierbabuena y jengibre?
Para preparar este té necesitas: 2 tazas de agua, un pedazo de jengibre, hojas de hierbabuena, 1 limón, miel para endulzar al gusto y una cucharadita de bicarbonato de sodio.
Lo primero de debes hacer es lavar las hojas de hierbabuena con agua y bicarbonato. En un bol pones el agua y agregas la cucharadita de bicarbonato, echas las hojas y limpia por unos minutos, después cuelas y vuelves a lavar solo con agua.
Luego ralla el jengibre. Pasa las dos tazas de agua a una olla y llévala al fuego. Cuando empiece a hervir, añade el limón cortado en rodajas, el jengibre rallado y la hierbabuena.
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Cocina por unos minutos, después procedes a bajar el fuego y hierve durante 5 minutos más. Transcurrido este tiempo apaga el fuego y deja reposar por unos 10 minutos.
Endulza con la miel antes de servir. Puedes tomarla por dos semanas después de cada comida y antes de irte a dormir.
