La mayoría de los padres hace lo mejor que puede por sus hijos. Sin embargo, seguro que hay ciertas cosas que te hubiese gustado que tus papás supieran cuando te criaron.
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En ese sentido, el Portal de la BBC News expone 3 elementos que ofrece la psicoterapeuta Philippa Perry en su obra “El libro que ojalá tus padres hubieran leído”.
A continuación, te los presentamos:
Acepta todos los estados de ánimo de tus hijos
El problema con los padres es que quieren que sus hijos estén supercontentos a todas horas.
La cuestión es que como los quieren tanto, no soportan verlos infelices, así que les dicen: “No estés triste”.
Pero es realmente importante que les permitan expresar todos sus estados de ánimo y que se mantengan a su lado mientras lo hacen.
Deben aceptar todas sus emociones para que no se sientan mal de estar tristes o enfadados.
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Recuerda que tus hijos se ven reflejados en ti
Hay que tener en cuenta que los papás son como un espejo humano para sus hijos.
Los niños internalizan la manera en que responden y eso se vuelve parte de su composición psicológica.
Si siempre los estás regañando, como diciéndoles, “¡Mira esos zapatos sucios!”, lo único que verán es tu cara enfadada.
Así que, asegúrate de relajarte antes de mencionar esos zapatos llenos de lodo.
Trata de sentirte alegre de verlos.
Todo comportamiento es una forma de comunicación
Si estás teniendo problemas de comportamiento con tu hijo, recuerda esto: todo comportamiento es comunicación.
Lo que tus hijos están haciendo es tratando de comunicar algo de la mejor manera que conocen.
Así que lo que debes hacer es descubrir el verdadero significado de ese comportamiento y ayudarles a encontrar una mejor manera de expresar lo que sea que están sintiendo.
Le debes permitir expresar todos sus sentimientos, aunque los encuentres inconvenientes.
A los niños hay que ayudarles a articular sus sentimientos.
Todo el mundo es diferente.
