La cantante mexicana Natalia Jiménez, recordada por haber sido la voz principal de La Quinta Estación, abrió su corazón en una reciente entrevista al revelar que desde niña enfrentó duros señalamientos debido a lo que años más tarde se confirmaría como TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad).
“Me tomaban como una niña tonta, con retraso, me trataban mal, hasta los profesores, porque no entendía cosas sencillas”, contó la intérprete de Creo en mí. Según explicó, fue diagnosticada con TDAH hace poco más de un año y, recientemente, también con Asperger. “Tengo un cerebro muy curioso, siempre me estoy enmascarando para verme más normal de lo que soy”, añadió.
Con esta confesión, Jiménez se suma a la lista de artistas y personalidades que han compartido públicamente diagnósticos relacionados con la neurodivergencia, entre ellos Anthony Hopkins, Keanu Reeves, Steven Spielberg, Lionel Messi, Tim Burton y Elon Musk. Muchos de ellos han señalado que, si bien estas condiciones representan un reto en lo social, también han potenciado su creatividad.
La artista subrayó la importancia de hablar con franqueza sobre estos temas para combatir el estigma, el bullying y la soledad que suelen enfrentar los jóvenes. En su caso, asegura que la música ha sido su gran refugio.
Además, aprovechó para recalcar su postura sobre la autenticidad en los escenarios: “Yo nunca hago playback, jamás en la vida me verás haciéndolo, porque prefiero sonar ronca, jodida, desafinada, que se me olvide la letra... prefiero que se note eso, que soy humana. No se me hace justo que la gente pague un boleto para ver a un artista que use playback, que no lleve músicos o que use 800 bailarines para distraer. Eso es una falta de respeto al público”.
Sobre las nuevas generaciones, Jiménez reflexionó que uno de los mayores desafíos actuales es la presión del “qué dirán”, un peso que considera más fuerte que nunca y que, en muchos casos, determina la forma en que los jóvenes se relacionan y se muestran al mundo.

