El puertorriqueño Dálmata volvió al mercado urbano con una nueva fusión que lleva por nombre, ‘Confesarte’, tema con toques de regional mexicano que no solo muestra su versatilidad en cualquier tipo de ritmo, también es la sumatoria de todos los aportes que le han hecho las distintas figuras del reguetón con las que ha colaborado, conocimientos que le han permitido trascender épocas y estilos musicales.
En entrevista para el diario gratuito más grande del mundo, el ‘Dalmeichon’ dio una pequeña cátedra del reguetón y nos habló de su primera aparición en la escena, esa que se remonta a 2002, cuando hizo parte del compilado ‘Fatal Fantasy 2’ de DJ Joe, álbum en el que estuvieron presentes otras destacadas figuras del género como Yaga y Mackie, Nicky Jam, Voltio, y su ‘parcero’ Ñejo, con quien dividió caminos hace algunos años luego de ser uno de los dúos más exitosos de Puerto Rico.
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“Hay muchas cosas que no conoce sobre el reguetón. Para 2005 DJ Joe ya tenía un disco que se llamaba ‘El Escuadrón del Pánico’, y ahí explotaron varias leyendas, dentro de ellas mi compañero de mil batallas Ñejo. Desde ahí empezó una evolución del género, empezamos a buscar nuevas pistas y a encontrar nuevos ritmos que combinaran con el reguetón”, afirmó el intérprete de ‘Solitaria’ junto a Alkilados.
“A mí me tocó aprender muy rápido, el aprender a cantar en tarima y también aprendí varias cosas de la producción. Yo viví toda esa evolución, pasando de DJ Joe a DJ Blass, Luny Tunes, Nelly y Tainy. Yo considero que he trascendido épocas y modas, cada vez que cambió algo, evolucioné junto al sistema”, añadió.
Seis años después de haber debutado en este trabajo con ‘No te hagas la difícil’ y ‘Que empiece la acción’, Dálmata salió al mercado con ‘Solitaria’, canción que lo llevó a estar presente en la primera casilla en los rankings de escucha, tema cuyo video oficial a la fecha supera las 300 millones de reproducciones en YouTube y las 250 millones en Spotify; canción en la que se le midió a incorporar sonidos de trompeta y en la que estaba acompañado por varios mariachis en el clip.
“Para 2007 no era la época para hacer estas innovaciones, pero yo me atreví a hacerlo. Fue toda una apuesta, ya que yo estaba buscando mi identidad y la encontré haciendo ese tipo de fusiones, no solo con ‘Pasarela’, también con ‘Sexo en la playa’. Yo incorporé elementos y temáticas que trasladaran a las personas a los lugares que quería, en este caso la playa”, afirmó el cantante.
Ahora en pleno 2025, en donde el regional mexicano es uno de los mandamases de la música latina, Dálmata llega con ‘Confesarte’, canción en la que él juntó su pluma junto a la de Daniel Eduardo Astudillo, en la que narra una historia de amor que llega a su fin por una serie de promesas incumplidas; tema en el que también estuvieron presentes en la producción Juan Sebastián Tunjo, Juan Camilo Álvarez, David Monsalve, Junior Rodas y Que Combito, con mezcla y masterización de EarCandy.
Este lanzamiento también se presenta como un consejo para aquellos fanáticos que estén pasando por una ruptura, y como él lo dice, no pretende manifestarse como una apropiación del regional mexicano, más bien como una fusión llena de respeto.
“A mí siempre me ha gustado el regional mexicano y los corridos, lo que pasa es que se hizo popular y yo no quería salir con una colaboración, quería llegar con algo propio. Yo no soy oportunista de los momentos de los géneros; esto es un invento que yo hice, que tiene elementos de corrido, pero es un trap, algo que tampoco había hecho antes. Le metí mucho esfuerzo, cantar rap en un corrido es bien difícil. Yo me he pulido desde el canto hasta la escritura, gracias a la práctica y la experiencia que yo he adquirido con los años. Yo todo lo que hago, lo hago con la gente que sabe y lo hago con respeto, que sea una fusión, yo no me apropio de los géneros, pero si les pongo su esencia”, argumentó.
“La confesión debe ser media confesión, uno no puede decir las cosas completamente. Hay que mantener el puesto y no terminar siendo el que ruega, o el que llora. En la canción está una sugerencia de cómo vivir una ‘tusa’, proceso en el que siempre están por encima los sentimientos propios, pero sin olvidar lo bonito que se tuvo a pesar del dolor. Pero si te piden un tiempo no puedes dar el brazo a torcer en nada”, complementó.