Peter Manjarrés es uno de los cantantes de vallenato más reconocidos en Colombia. Conocido como “El Caballero del Vallenato“. A lo largo de su carrera, Manjarrés ha logrado fusionar la tradición vallenata con sonidos más modernos, creando un estilo propio que ha conquistado a millones de fanáticos. No obstante, el “Caballero” fue declarado culpable de evadir sanción que lo obligaba a pagar una indemnización a corista que trabajó con él entre 2003 y 2008, esto por par de la Corte Suprema de Justicia.
Dicho proceso se originó después de que Italo Rafael Todaro presentara una demanda en contra de Peter Manjarrés, reclamando que se reconociera la verdadera relación laboral y no solo las órdenes de prestaciones de servicios. Todo inició en el Juzgado Tercero Laboral del Circuito de Valledupar, que falló en contra del corista en septiembre de 2012.
Este proceso de años llegó también al Tribunal de Santa Marta, que se encargó de ratificar la decisión y llevar a los implicados y su caso a la Sala de Casación Laboral de la Corte Suprema. Allí la sala consideró las pruebas del corista, quien no podía decidir libremente su asistencia a los eventos musicales y que el cantante tenía la facultad de imponer sanciones económicas en caso de inasistencia, acción que reflejaba una relación de subordinación propia de un contrato de trabajo.
¿Por qué Peter Manjarrés perdió la batalla legal ante su excorista?
A pesar de las pruebas presentadas por Todaro, Manjarrés impugnó la decisión indicando que los testimonios del corista carecían de rigor, por lo que interpuso una tutela ante la Sala de Casación Penal, que determinó que no había argumentos erróneos ni arbitrarios en la sentencia condenatoria.
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Finalmente, la Sala Civil de Casación desechó los testimonios que decían que el corista actuaba de manera independiente, debido a que no estaban respaldados por pruebas ni detalles concretos sobre las otras agrupaciones con las que supuestamente tenía relación. Así le darían la razón a Italo Rafael Todaro, quien ganó el caso, mientras que Peter Manjarrés está obligado a cumplir con las obligaciones laborales que nunca reconoció en el lapso de tiempo indicado.