La empresaria y DJ Yina Calderón ha encendido las alarmas en redes sociales al repostear un video que expone la crítica situación alimentaria que estarían enfrentando las mujeres privadas de la libertad en la cárcel El Buen Pastor de Bogotá. Entre las voces de auxilio que se escuchan en el material audiovisual, resuena la de su amiga, la también reconocida empresaria ‘Epa Colombia’, confirmando las denuncias de escasez y mala calidad en los alimentos.
Video revela que ‘Epa Colombia’ está recibiendo alimentos podridos en la cárcel El Buen Pastor
El video, grabado desde el interior del centro penitenciario, muestra a varias reclusas reclamando airadamente por la calidad de la comida que se les está ofreciendo. Sin embargo, lo que más ha impactado es la voz de ‘Epa Colombia’ que se escucha claramente diciendo: “Tienen hambre, tienen mucha hambre amiga, están en huelga. Llevamos días sin comer, por favor que nos ayuden, todo está picho”. Esta declaración subraya la gravedad de la situación, sugiriendo que la falta de alimentación adecuada no es un incidente aislado, sino un problema persistente que ha llevado a las reclusas a una medida extrema como la huelga de hambre.
La denuncia de Yina Calderón no se limita a su preocupación por ‘Epa Colombia’. Al republicar el video, la empresaria hizo un llamado directo al presidente Gustavo Petro, etiquetándolo en la publicación. Este gesto busca generar una respuesta oficial y visibilizar la precaria situación no solo de su amiga, sino de todas las mujeres recluidas en El Buen Pastor. El clamor por ayuda se extiende a las condiciones generales de las internas, evidenciando una posible vulneración de derechos fundamentales en el sistema penitenciario colombiano.
Las denuncias sobre las condiciones alimentarias en El Buen Pastor no son nuevas. En los últimos meses, se han registrado varias protestas y quejas por parte de las reclusas y organizaciones de derechos humanos sobre la escasez de comida y la mala calidad de los productos suministrados. La intervención de figuras públicas como Yina Calderón, amplificando estas voces, pone de manifiesto la urgencia de una revisión y una acción contundente por parte de las autoridades competentes para garantizar el bienestar y la dignidad de las personas privadas de la libertad.
