La reina Letizia dejó ayer por la noche una imagen nunca antes vista. Durante la cena de gala enmarcada en su Viaje de Estado, apareció sentada. Mientras los reyes Felipe VI, Guillermo y Máxima llevaron a cabo el acto a pie, ella lo hizo en un taburete. ¿La razón? Su recaída en el Neuroma de Morton.
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La reina Letizia y sus extraños gestos en su Viaje de Estado en Holanda
El Neuroma de Morton es una afección que afecta el metatarso, normalmente en la zona entre el tercer y cuarto dedo del pie, y que es algo muy doloroso. De hecho, durante esos días ha tenido algún gesto incómodo en sus diferentes apariciones, y ahora todo tiene sentido puesto que sería por el gran dolor y la incomodidad de sufrir esta terrible dolencia en pleno viaje. Sin embargo, esta mañana ha reaparecido tras una noche complicada y lo ha logrado con la mejor actitud.
La reina Letizia cuenta con una agenda intensa junto a Máxima de Holanda en el que van a atender distintas actividades. La primera de ellas ha sido una visita a Lab6, un centro dedicado a actividades deportivas y de cultura para personas jóvenes. Ahí se ha mostrado como toda una profesional y ha tratado que apenas se note su molestia, aunque a veces ha tenido expresiones inevitables.
La reina Letizia sufre de Neuroma de Morton
Por su lado, la reina Letizia ha llegado sonriente, conversando de manera amigable con la anfitriona, saludando a los que estaban presntes en la puerta del lugar, siempre atenta a todo lo que sucedía adentro. No obstante, hubo gestos que no pasaron desapercibidos, como su rostro serio en algunos momentos o el constante levantamiento del pie de su zapato.
La reina Letizia tiene una jornada complicada en la que tendrá que cuidar al máximo posible sus pies, puesto que la situación podría empeorar su dolor.