El árbitro Wilmar Roldán tuvo una noche histórica en su carrera, pues en el clásico paisa entre Atlético Nacional y Deportivo Independiente Medellín fue uno de los partidos en los que más tarjetas mostró en los más de 20 años de trayectoria dentro del arbitraje. Las últimas de ellas, las mostró en los camerinos del Atanasio Girardot, después de la preocupante pelea que se dio entre jugadores mientras se retiraban del terreno de juego.
Como quedó registrado en la transmisión del juego, Washington Aguerre perdió los papeles y se fue encima de Matheus Uribe, quien le habría dicho algo que lo hizo salirse de casillas y este se le fue directamente a los golpes, necesitando de tres y cuatro personas para separarlos y evitar una golpiza mayor entre ellos, que siguieron insultándose hasta dentro del túnel, donde la gresca no hizo más que empeorar y destarase una batalla campal entre todos.
Ante esto, el juez se puso en modo mariachi y repartió tarjetas a todo dar, siendo un récord de la liga actual y dejando a los dos equipos incompletos de cara a lo que será la última fecha de cuadrangulares, donde ambos se juegan la vida en diferentes aspectos, pero que parten con desventaja ante semejante trifulca que terminó por afectar a ambos y favoreciendo a sus respectivos rivales.
Jugadores de Medellín y Nacional se fueron a los golpes al terminar el clásico
El clásico paisa fue uno de los duelos más atractivos del día en el fútbol sudamericano, dado el contexto de ambos y la tensión que suele haber en cada uno de estos partidos, en especial cuando corresponden a juegos definitivos en cuadrangulares o finales. En el de la jornada, Nacional buscaba no bajarse de la pelea por acceder a la gran final, mientras que el DIM peleaba por un punto para ir a Copa Libertadores.
Ante la victoria del Verdolaga, el Medellín quedó caliente y dependiendo de una victoria contra el Junior de Barranquilla en la última jornada. Eso sí, le tocó tragar veneno, pues al final varios de los suyos se desbocaron y podría haber sanciones graves que los dejen incompletos de cara a lo que viene, tal como quedó evidenciado en las cámaras de Win Sports en las últimas escenas que mostraron desde el Atanasio Girardot.
Al parecer, algo le habría dicho Matheus Uribe al portero Washington Aguerre, cosa que lo hizo estallar y perder el control, yéndosele encima y cogiéndolo del cuello, siendo separado por varios jugadores que poco pudieron hacer para evitar el fuerte cruce entre ambos, cosa que se fue hasta los túneles del estadio y que se perdieron allí para las cámaras.

