Una de las deportistas más importantes del país y la mejor de Bogotá es la patinadora Gabriela Rueda, quien es campeona mundial de su competencia, vencedora en distintos campeonatos y la primera medallista olímpica de su deporte, marcando así un hito para el deporte y su carrera representando a Bogotá y al país.
Tras los Juegos Mundiales que se llevaron a cabo en China, donde ganó tres oros, en carrera eliminatoria de 15.000 metros en ruta, 5.000 metros por puntos en pista y carrera eliminatoria de 10.000 metros en pista femeninos. Además, cosechó dos platas, en la carrera por puntos, 10.000 metros en ruta y 1.000 metros en pista femeninos.
En PUBLIMETRO COLOMBIA, tuvimos la oportunidad de hablar con la deportista que atraviesa uno de los mejores momentos en su carrera dentro del patinaje, contándonos detalles sobre su preparación, sus inicios, su entrega y la historia de su famoso apodo, ’La Gaviota’:
¿Qué se siente ser la primera medallista olímpica de patinaje en la historia de Colombia?
Eso fue en el 2018. Recuerdo que trabajé durante 2 o 3 años, más o menos, por obtener este cupo para unos Juegos Olímpicos y después convertirme en la primera medallista olímpica del patinaje en carreras. Fue en un evento juvenil, pero como todos saben, el patinaje no hace parte de los Olímpicos de verano, pero bueno, tuve la fortuna y la oportunidad de que de ir a ellos. Es el título que nunca voy a olvidar y creo que es el título que más recuerdo, que más tiene significado para mí.
¿Qué significa China para ti?
En China fue mi primer título del mundo. En la categoría juvenil fue en el 2017, quedé campeona del mundo con 16 años. Ahorita también tuve la oportunidad de volver la China en uno de los eventos más importantes de mi carrera deportiva como lo son los Juegos Mundiales y ser campeona en estos juegos, además de tener la oportunidad de representar a mi país, de ratificar lo que he hecho durante muchos años. La verdad, China es un lugar muy especial en cuanto a mi carrera deportiva.
¿Cómo fue esa preparación para los Juegos Mundiales en China?
Tuvimos una preparación en Guarne, Antioquia, durante un mes con todo el equipo de los World Games y con toda la Selección Colombia que también se está preparando para el próximo mundial que es en septiembre. Entonces, la verdad estuvo muy fuerte, muy dura, sabíamos que el nivel iba a estar superalto, que no la íbamos a tener fácil. Gracias a Dios llegamos en una buena manera de estos juegos mundiales y obtuvimos muy buenos resultados.
¿Cómo ha sido esa transición de pasar de categorías juveniles las ligas mayores?
Yo pasé de juvenil a los 18 años, obviamente, nuestro deporte no tiene una sub 23 o algo así, para hacer esa transición un poquito más calmada, subes de 18 años ya a competir con la máxima categoría. Entonces es muy pocos deportistas lo logran así de rápido, normalmente son pocos los que pasan al siguiente año a la Selección Colombia. La madurez deportiva que llevan los corredores de la categoría mayores a los juveniles es totalmente diferente.
¿Cómo fueron tus inicios en el patinaje?
Yo empecé a los 8 años a patinar en la ciudad de Bogotá. Soy nacida en Bogotá. Mis padres son santandereanos. Patiné toda mi vida en Bogotá, he platinado siempre en el mismo club, se llama Club Deportivo Tequendama. Mi mamá y mi padrastro siempre me vieron esa chispita y esa hiperactividad que tenía de niña y dijeron, “No, vamos a ponerla a hacer algo, vamos a ponerla a hacer algún deporte para que explote de toda esta energía”. Mi hermana y el esposo de mi hermana tenían el contacto deportivo en el patinaje, entonces, por ahí, se fueron dando las cosas del club, entonces decidieron meterme, solamente entrenaba sábado y domingo porque yo era demasiado pequeña en estatura.
Fue un proceso demasiado largo, duré 4 o 5 años en escuela, porque mi entrenador pensaba que no tenía la edad requerida para pasar a patín profesional, a ligarme, a federarme y obviamente ese era el sueño de todo patinador pequeño que viene en proceso. Después, poco a poco, no era la mejor, pero iba pasando, iba escalando, ya cuando me federaron, ya íbamos metiéndonos más en el cuento del patinaje con mi familia. Eso sí, yo amo correr por Bogotá, siempre será un honor y un orgullo, un placer correr por la capital. De por sí siempre he tenido el apoyo del instituto, el apoyo de mi ciudad, en este momento estoy demasiado contenta con la parte del deporte en Bogotá.
¿Qué crees que hace a Colombia una potencia mundial del patinaje?
El patinaje en Colombia es un deporte demasiado practicado en todas las ciudades, en todos los municipios hay gente patinando. El proceso que nosotros llevamos en el patinaje deportivamente es demasiado duro, nosotros somos los mejores porque así nos preparamos, para ser los mejores. Es un proceso de dos meses entrenando en la mañana, tarde, noche, llueva, truene o relampaguee, sacamos nuestro tiempo para entrenar.
¿De dónde sale el apodo de ‘La Gaviota’?
El apodo es por mi mamá. Mi mamá me decía la gaviota y tal vez se lo escuchó a Julio a algún narrador de nuestras carreras, entonces salió con la gaviota en mi primer mundial y así me quedé durante todos los años que llevo en la selección Colombia. Entonces ella me decía ‘mi gaviotica’ y así me quedé.

