Millonarios ha sido uno de los equipos que peor comienzo ha tenido en este segundo semestre del 20265 en medio de la crítica situación que se atraviesa en la parte administrativa y deportiva. Para David González, el entrenador del equipo, la situación se torna cada vez más hostil por el mal rendimiento de la plantilla, además de las derrotas dolorosas y humillantes que han afectado el sentimiento de los hinchas y amantes de los colores.
En la primera y segunda fecha, el embajador no pudo tener acción por situaciones relacionadas al estadio Nemesio Camacho El Campín que no estaba disponible para recibir al Unión Magdalena y al Deportivo Pasto, dos juegos que están programados para disputarse después y que pueden servir para que el elenco bogotano cuadre caja en puntos.
Ya en su presentación de la fecha tres y cuatro el dolor se apoderó de los corazones albiazules tras perder de forma vergonzosa y dolorosa ante La Equidad en primera instancia, y ante Llaneros en el estadio El Campín, donde los mismos fanáticos se volcaron en contra de su equipo.
Tal es la decepción que posterior al juego, la organización de barras organizadas del elenco capitalino emitió un comunicado dejando saber la frustración que este presente ha causado y la decisión de facetas a los dirigentes en cuanto al dinero, pues han decidido no asistir al próximo juego de Millonarios como local ante el Real Cartagena por la Copa BetPlay:
“La Unión Nacional de Barras de Millonarios UNIBAM. informa a la opinión pública, a los medios de comunicación, y a toda la familia del club, que NO asistiremos al próximo partido por Copa como una forma pacífica y contundente de protesta ante los reiterados malos resultados, la falta de compromiso y la ausencia de respuestas claras por parte de la dirigencia y el cuerpo técnico. Como hinchada organizada, hemos acompañado al equipo en cada momento, tanto en las buenas como en las malas, con presencia, aliento y trabajo. Sin embargo, la situación actual ha sobrepasado los límites del respeto a la historia del club, a la camiseta y a la afición.
Esta decisión no nace del capricho, sino del dolor y del hartazgo de ver un proyecto deportivo sin rumbo, sin identidad y sin autocrítica. Creemos que el silencio en la tribuna será más elocuente que cualquier cántico. Reafirmamos que nuestra protesta es: Pacífica, sin violencia ni ataques personales. Colectiva, en unidad con muchos hinchas inconformes."