Uno de los clubes más importantes de las últimas décadas dentro del Fútbol Profesional Colombiano ha ido el Deportes Tolima. Muchos incluso se atreven a llamarlo el nuevo grande, teniendo en cuenta que ha sumado una buena cantidad de títulos y logros deportivos que no solían darse antes con regularidad, dejando así la sensación de que surgió un fuerte competidor para elencos como Once Caldas o Medellín, que serían los más cercanos a su nivel.
Asimismo, el surgimiento de futbolistas importantes dentro de la institución que se han metido en la historia del equipo, como Junior Hernández, Marco Pérez o hasta Sebastián Villa, futbolistas que han dejado copas y la vara bastante alta en sus respectivas posiciones para una hinchada que poco a poco se ha convertido en una de las más exigentes del campeonato por la costumbre que se les ha asignado con la disputa de finales de forma bastante recurrente.
Eso sí, para el segundo semestre del 2025 la cosa no pinta muy bien, teniendo en cuenta la cantidad de jugadores importantes que han abandonado al club y que los jugadores que llegaron en su reemplazo no son los que se esperaban, en especial, teniendo en cuenta el comienzo del proceso de Lucas González.
Una de las bajas más importantes que se confirmó en las últimas oras fue la salida de Julián Quiñones, máximo ídolo de la institución ibaguereña y que, ante todo pronóstico, decidió darle un nuevo rumbo a su carrera partiendo hacia el Deportivo Cali donde estará al mando de uno de sus grandes amigos, el samario Alberto Miguel Gamero, con quien supo ser campeón en el vino tinto y oro y mismo que le daría un lugar bastante importante en el funcionamiento del azucarero.

