Chelsea dio el gran golpe al coronarse campeón del Mundial de Clubes de la FIFA al superar al PSG en una final que terminó con bronca y con una agresión del técnico español Luis Enrique, al servicio del equipo francés a uno de los jugadores rivales.
En el duelo que definió el título, los ingleses se impusieron 3-0, con un doblete de Cole Palmer y otro tanto del brasileño Joao Pedro.
Una vez finalizado el partido, todo ardió y hubo bronca entre los jugadores de ambos equipos que se cruzaron sobre la media cancha.
Allí apareció el entrenador Luis Enrique que le terminó dando un manotazo en el rostro a Joao Pedro que al sentir el contacto se fue al piso.
Miembros de la seguridad y otras personas del staff de ambos equipos debieron intervenir para separar a los jugadores de ambos bandos.
