Sebastián Montoya, piloto colombiano de Fórmula 2, vivió este sábado 5 de julio un momento cargado de simbolismo y emoción: logró su tercer podio de la temporada al terminar segundo en la carrera sprint del Gran Premio de Gran Bretaña, justo 20 años después de que su padre, Juan Pablo Montoya, ganara en el mismo circuito de Silverstone en la Fórmula 1 con Sebastián en brazos, siendo apenas un bebé de tres meses.
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El destino volvieron a unir el apellido Montoya con uno de los escenarios más emblemáticos del automovilismo. A bordo del monoplaza de Prema Racing, Sebastián protagonizó una brillante remontada desde la sexta posición, y con una maniobra limpia e inteligente en la vuelta 15 sobre Kush Maini, se posicionó en el segundo lugar, lugar que mantuvo hasta la bandera a cuadros. Su rendimiento fue tan sólido que también registró la vuelta más rápida de la carrera, con un tiempo de 1:44.198.
Solo fue superado por el piloto italiano Leonardo Fornaroli, pero eso no impidió que el colombiano celebrara con orgullo y emoción un resultado que no solo suma en su camino hacia la élite del automovilismo mundial, sino que también honra el legado de su padre, uno de los pilotos más importantes en la historia del país. Hoy, dos décadas después, los Montoya siguen haciendo historia en Silverstone.
