Con polémica comenzó el clásico bogotano entre Santa Fe y Millonarios cuando Andrés Llinás le metió un codazo en la cabeza a su rival, Daniel Torres.
La acción de la discusión se dio apenas a los 10 segundos del partido que dio arranque al cuadrangular B del fútbol colombiano.
Tras un balón largo, el defensor de Millonarios fue directo a buscar al volante de Santa Fe al que impactó de manera vehemente con su codo en la cabeza.
El árbitro del partido, Carlos Ortega, consideró que dicha jugada solamente daba para tarjeta amarilla. Sin embargo, el VAR apreció que la agresión daba para algo más y lo llamó a observar, sin embargo, el juez se mantuvo en su decisión y resolvió sostener su decisión de no expulsar.
Varios analistas arbitrales, aficionados y periodistas coincidieron con que dicha jugada daba para una expulsión directa, algo que no determinó el juez que resolvió cargar de polémica el partido entre Santa Fe y Millonarios desde la primera jugada.
