Una de las polémicas más grandes que ha surgido entre los amantes del Fútbol Profesional Colombiano ha sido la fundación de Win Sports y la posterior decisión de cobrar una mensualidad para poder ver los encuentros del equipo de los amores de millones de personas, a pesar de que nuestra liga y torneos no son lo más atractivo por múltiples motivos, en especial, hablando de lo infraestructural, que suele presentarse en cada escenario del país.
A pesar de que es una de las empresas más resistidas de la nación y que se han creado infinitas campañas de desprestigio en su contra, el canal ha sabido mantenerse con múltiples programas, ideas y transmisiones de diversas competiciones que alimentan su programación, pero que no terminan de convencer a los televidentes, en especial por cierto errores que suceden día a día en sus señales en vivo y algunas patinadas de sus periodistas con algunos equipos del país.
De hecho, esto último ha llevado a miles a dejar de consumir las narraciones de los encuentros, obligados a ver el juego en una pantalla y escucharlo en algún otro medio, como la radio, o, simplemente, evitar la narración y verlo en silencio, tal y como lo han expresado en redes sociales ante el descontento que genera uno que otro comunicador que conforma la nómina del canal.
Ahora, en la última joyita del canal, se dio un error grosero en la transmisión del juego entre Millonarios y Boyacá Chicó, que, al parecer, se replicó a otras señales con otros de los juegos que ya estaban terminando. Y es que en el centro de la pantalla apreció el aviso de poca batería de un computador con el que se hacía la señal en vivo, dejando en ridículo al canal y, seguramente, causando uno que otro regaño en la interna de la empresa.