Uno de los representantes de Colombia en esta Copa Libertadores, ante todo pronóstico, es el Bucaramanga, equipo que, pese a tener un arranque furioso en la competición empatando ante Colo Colo y Fortaleza, y ganándole a Racing en Argentina, parece que el equipo volvió a su realidad de equipo modesto a nivel internacional, cayendo vergonzosamente contra el mismo equipo argentino en el Américo Montanini por 4 a 0 en medio de un juego cargado de malos niveles, errores grupales, individuales y todo lo que se podía hacer para caer de la peor manera posible.
Durante los 90 minutos se le vio al equipo colombiano muy inferior con respecto a su oponente, que planteó un juego claro, esperar y contra golpear, aprovechando la deficiencia defensiva del FPC en general y que el leopardo demostró en su máxima expresión. La falta de viveza a la hora de ganar los rebotes, los constantes fallos en la mitad del terreno y un notorio cansancio ponen en riesgo la clasificación a la siguiente fase de un club que, irónicamente, hace apenas dos semanas tenía enloquecidos a todos en el continente por ser líder de uno de los grupos de la muerte.
Aunque es cierto que no todo está perdido, al Bucaramanga le toca jugar con la más fea, pues deberán visitar a Colo Colo, que, a pesar de jugar sin público, es una plaza compleja y necesitarán mucho más que suerte si quieren sacar los puntos de Chile. Asimismo, la visita a Fortaleza de Brasil será un juego del todo por el todo, teniendo en cuenta que ambos buscarán la victoria con la misma necesidad para poder pelear octavos, y, en caso de que se congele el pecho, al menos entrar a Sudamericana, ya que hasta eso se le complicó a los colombianos por la falta de jerarquía en momentos importantes.