Un año de redención para el Barcelona, al menos eso es lo que quiere Xavi Hernández. Luego de un tormentoso 2021, con salida de Lionel Messi en el medio, el equipo culé inauguró 2022 visitando al Mallorca y afectado por una ola de lesionados, la mayoría de ellos contagiados por covid 19.
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Xavi armó lo que pudo y con ello salió a jugar. En frente, uno de los rivales más flojos de LaLiga, pero que hace poco sorprendió al Atlético Madrid, por lo que había que tener cuidado. El partido fue trabado, sin poco juego, aunque el protagonismo en todo momento fue del Barça. Pero cuando no se puede por tierra, bien está intentarlo por aire.
Así llegó la apertura del marcador. El criticado y resistido Luuk De Jong conectó un cabezazo finalizando el primer tiempo y le dio la ventaja al equipo culé. De la manera más inesperada, Barcelona lo ganaba y quedaba a tiro de la zona de Champions.
El segundo tiempo fue un dolor de ojos en gran parte, hasta que faltando cinco minutos apretó Mallorca. E iba a tener su oportunidad y ¡vaya qué chance!
El héroe fue Marc-André ter Stegen, quien hizo una atajada que solía hacer tiempo atrás, pero que últimamente no se le veían. Ante el remate de Jaume Costa, con una mano y toda la plasticidad, el alemán salvó la victoria culé.
Con el triunfo, Barcelona subió al quinto lugar, a un punto de la zona de Champions League. Parece que 2022 cambió la mano culé, ahora es la mano de Ter Stegen y, más atrás, la de Xavi Hernández.
