La pandemia ocasionada por el COVID 19 golpeó distintos sectores tras obligar a cerrar puertas y trasladar todo a la virtualidad y, sin duda, los microempresarios que vivían de la presencialidad fueron unos de los más golpeados con este suceso.
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Sin embargo, de las crisis surgen oportunidades y mientras todo volvía a la normalidad, fueron muchos los que decidieron darles un giro a sus modelos de negocio para adaptarse a las nuevas formas de consumo, mientras que otros se motivaron a apuntarle a nuevos emprendimientos enfocados en el desarrollo tecnológico, el consumo digital, las redes sociales, mercadeo, entre otros.
Colombia se ha convertido en un país de emprendedores y eso se refleja en la iniciativa de crear empresas durante el último año. Según cifras del Registro Único Empresarial y Social (RUES), entre enero y septiembre de 2022 se crearon en el país 256.675 empresas, un 2,3 % más que en el mismo periodo del 2021 cuya cifra fue de 251.008. La entidad, que recoge información de las 57 Cámaras de Comercio en el país, asegura que el 48 % de las empresas creadas en 2022 generaron al menos un empleo.
Aunque estas cifras sean positivas y signifiquen un avance económico en el país, para nadie es un secreto que uno de los mayores obstáculos al momento de emprender es no contar con suficiente capital para invertirle a un proyecto. No obstante, existen entidades bancarias que han diseñado productos para apoyar a los pequeños y grandes empresarios, beneficiándolos con tasas de intereses preferenciales y otorgándoles beneficios.
Este es el caso del Banco Caja Social, que creó su Tarjeta de Crédito Productiva, un producto de uso nacional e internacional que está enfocado en quienes aspiren crear o hacer crecer su negocio y apoyándolos con cuotas de manejo gratuitas, programas de asistencias y seguros, tasas de interés preferenciales, entre otros.
¿Cuáles son sus ventajas?
· Cuota de manejo gratis. Quienes adquieran este producto podrán acceder al beneficio por un tiempo de 6 meses desde la fecha de emisión de la tarjeta y, posteriormente, si cumple con el número de transacciones en compras y/o avances, los cuales son 5 por mes o 15 al trimestre. Adicionalmente, las compras realizadas con la Tarjeta de Crédito Productiva no generan costos adicionales a los intereses de financiación.
· Beneficios tributarios. Con la Tarjeta de Crédito Productiva podrá mantenerse al día con sus obligaciones tributarias y acceder a los descuentos otorgados por los entes territoriales, ya que es uno de los medios autorizados por la ley para reconocer las deducciones de impuestos a la renta y el impuesto a las ventas descontable.
· Sin intereses. Si selecciona la opción de diferido a una cuota, no tiene saldos pendientes y realiza el pago total dentro de la fecha estipulada, podrá tener hasta 45 días de financiación en compras sin cobro de intereses. También tendrá una tasa de interés preferencial unos puntos por debajo de la tasa de interés para las tarjetas de crédito.
· Transacciones. Podrá realizar pagos de insumos o servicios de su empresa sin afectar el flujo de caja, así como avances y consultas de saldo gratis en cajeros propios.
· Plazos. Para compras nacionales el cliente escoge el plazo entre 1 y 36 meses, mientras que quienes realicen compras internacionales dependerá del valor de su compra: si es inferior o igual a $30.000 será diferida a 1 mes; entre $30.001 y menores a $300.000 será a 24 meses y, para compras iguales o superiores a $300.000 sería diferido automáticamente a 36 meses.