Este grupo de ciclistas entrena por una tranquila calle de Nueva Orleans, cuando de pronto el que lleva un casco blanco recibe un impacto de bala.
El dolor le impide seguir. Sus colegas se dan cuenta y paran para ayudarle. En ese momento ni el herido ni sus compañeros saben qué ha pasado. Será más tarde en el hospital cuando averiguen que ha sido víctima casual de un tiroteo. Gracias a la grabación tienen la prueba.
Ciclistas como ellos aseguran que llevan una cámara por la cantidad de delitos, atracos y accidentes que ocurren en la carretera.El herido, con problemas de movilidad, se recupera en el hospital.
Video: Reuters.
