La mas reciente “pandemia” que azota al mundo, y que quizás hace pocas semanas veíamos con despreocupación y escepticismo, nos tocó en medio de un mundo digital donde quedaron atrás varios principios y valores; pareciera que el mundo quisiera “reiniciarse” a sí mismo saturado de tanta toxicidad, de tanta incomprensión e indolencia.
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Pues ha llegado el momento, y qué bueno que en Colombia, apostando a su gente llena de alegría y optimismo, logremos juntos combatir ese enemigo común, el COVID-19. Sólo con amor, mucha disciplina, orden, solidaridad y unión lo lograremos; el enemigo es muy diminuto y no hay tiempo que perder en nimiedades de baja política, cuando lo que se debate es la existencia de la condición humana.
Si le apostamos a la solidaridad y a la disciplina de no salir, estar confinados y que el desplazamiento físico sea estrictamente a lo necesario, con las salvaguardas de higiene y protección, lograremos contrarrestar el efecto de los picos de contagio. Así el sistema y nuestro gobierno lograrán asistir a quienes resulten contagiados con celeridad y certeza medica – científica.
¿Pero a qué se enfrenta el mundo? A ciencia cierta, mucho se especula, lo único cierto y con elementos de convicción suficientes, amparados en investigaciones periodísticas, múltiples fuentes y un rigor en el análisis documental, como los mas recientes estudios del Centro de Pensamiento para la Estrategia de Estudios Internacionales – (CSIS) – documento con información altamente confiable, denominado “amenazas biológicas a la seguridad nacional de los Estados Unidos”.
Fechado el 20 de noviembre del 2019, este documento relata de manera clara, sucinta y obvia la clara amenaza próxima a los Estados Unidos. Fue presentado al Senado, al comité de servicios armados, subcomité de amenazas y capacidades biológicas. El documento, rico en información estratégica y geopolítica, muestra que el riesgo no es solo para los Estados Unidos sino para sus aliados en la región y el globo en general, analizando la conflictividad estratégica y los daños poblacionales y los costos en infraestructura medica.
La pandemia estaba proscrita, amenazas biológicas en laboratorios que buscaban propagar una pandemia, a una gran velocidad, con costos sociales y económicos globales sin precedente alguno, el documento recomendó en su momento a la comisión tomar las medidas necesarias para hacer un frente de contención denominado políticas de biodefensa: «es mucho mejor pagar un precio económico ahora, en protección y bioseguridad y defensa, o pagar un costo humano y económico mucho mas grande».
Como antecedente, relaciona los costos para contener el ébola en África entre los años 2014-2016, y menciona cerca de cinco programas confidenciales de Washington para buscar generar políticas de bioseguridad y defensa, inclusive apelando a crear laboratorios de ciencia y tecnología en Suramérica. Es claro que la maldad para lograr posicionar poder global no tiene limites, y también hay muchos hechos en contexto que dirigen hacia la responsabilidad de China en sus laboratorios secretos de la zona cero del instituto de virología en Wuhan, y la comunidad internacional en un momento apropiado deberá pronunciarse sobre ello.
Para no dar conclusiones sino dejar al lector con datos precisos para su propia conclusión, dejo estos: un general iraní con intereses en Iraq, auspiciador de Hezzbollah y que ayudó a Hussein y recientemente al régimen de Siria con armas biológicas, fue dado de baja en un bombardeo en Iraq en enero pasado, justo cuando fueron atacadas refinerías de Arabia Saudita en la misma región. A pocos días fue derribado por el régimen de Irán un avión ucraniano, país en disputa con Rusia, con un centenar de civiles a bordo, cientos de jóvenes iraníes que buscaban mejor futuro; al mismo tiempo se denunciaban las relaciones de Hezzbollah, ELN y Maduro en la región por EEUU, en Bogotá.
Corolario: nos va mejor juntos, con convicción, solidaridad, disciplina y profunda unión, apoyando con vehemencia al gobierno, porque como dice el documento al comité solo “nos queda prevenir y ser resilentes». Yo le agregaría, mas creyentes.