Opinión

La cancelación de Lollapalooza Colombia tiene un culpable

Aclaración y disculpa de Mónica Martínez

PUBLICIDAD

“Debo aclarar mi posición frente a mi columna de opinión publicada el día 7 de julio en Publimetro Colombia, ‘La cancelación de Lollapalooza Colombia tiene un culpable’.

Mi intención frente al articulo fue generar un debate sobre opiniones ya dadas días atrás del anuncio de esta noticia. Presento mis más sinceras disculpas a mis colegas Alejandro Marín y Carlos Solano por no hacer uso adecuado de las comillas y citación pertinente, así como a Publimetro, medio que me abrió sus puertas para expresar mis opiniones.

Hice uso de la siguiente frase para dar a conocer varios puntos de vista al respecto: ‘las razones de su cancelación se han dividido en varias posiciones’.  

Una de las posiciones es dada por Alejandro Marín en su artículo publicado en El Espectador el 1 de julio de 2016 ‘Cancelado Lollapalooza Colombia: Corre, Lolla, Corre ’ y retomado más adelante por Carlos Solano de El Tiempo en su artículo   en Lollapalooza: un llamado al público de los conciertos’ publicado el 4 de julio de 2016:

Lollapalooza Colombia fue la confirmación de nuestro ingreso a las grandes ligas del entretenimiento musical en el mundo. Su ausencia, hoy, no solo es preocupante para el crecimiento de la oferta musical del país, debe generar profundas reflexiones sobre cómo funcionan las políticas culturales públicas en Colombia en cuanto a emprendimiento y garantías de desarrollo de proyectos y si realmente hemos aprendido, los medios, artistas y en especial los públicos, a entender, desde la cultura y desde la sensibilidad, la dinámica y vertiginosa industria musical del presente siglo”

El director de la emisora radial La X, Alejandro Marín, deploró la reacción del público:

“Estamos 20 años atrasados en la cultura festivalera; esto es una muestra muy clara de ello. Hay una cosa: no estoy diciendo que el público sea bobo, el público se dio cuenta desde un comienzo que algo andaba mal y que las cosas no iban a funcionar. Pero la avalancha de odio que produce esto es lo más preocupante. Desde esa perspectiva, uno dice:

‘Qué miedo vivir en este país con una turba enfurecida cada vez que le ofrecen cultura’. Yo estoy muy asombrado con este tema”.

En su columna ‘Corre Lolla Corre’, Marín agregó sobre el tema, por medio de su blog Themusicpimp:
“¿Qué les dices a los patrocinadores? ¿Cómo negocias con los anunciantes? ¿Cómo recuperas la credibilidad? Son preguntas que irán resolviendo en la medida en que pasen las horas.

Y surgen ya muchas más, de carácter personal: ¿Estamos preparados para avanzar en el desarrollo cultural? ¿Aprenderemos a disfrutar de los esfuerzos colectivos para poner a Bogotá en el mapa del entretenimiento mundial sin vituperar a los locales y sin demeritar todos los esfuerzos? ¿Aprenderemos a descubrir cosas nuevas? ¿Construiremos esta audiencia como una audiencia ejemplar, o nos contentaremos con seguir estando veinte años atrasados en el tiempo, pensando en los Lollas del 91 y añorando a los Guns N’ Roses?

Mónica Martínez

*Las opiniones expresadas por el columnista no representan necesariamente las de PUBLIMETRO Colombia S.A.S.

Tags

Lo Último