Un caleño lleva dos años pidiendo la eutanasia por una enfermedad, este es el drama de Víctor Escobar.
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Lo anterior, debido a enfermedades no terminales que le impiden vivir con dignidad y pide para descansar en paz.
Caleño pide eutanasia urgente
Durante años ha recibido negativas después de interminables trámites para lograr la eutanasia en Cali. Ahora, guarda la esperanza en la sentencia de la Corte Constitucional que amplió el derecho fundamental a morir dignamente. Esto para personas afrontan enfermedades no terminales.
El historial clínico muestra dos accidentes cerebrovasculares y limitaciones en su movilidad ante una trombosis. El pasado viernes, 3 de septiembre, les llegó el documento en el que se radica el ‘procedimiento eutanásico’, pero la espera no se ha terminado.
Se conoció sobre su caso en las redes cuando desde febrero de 2020 empezó a pedir que se le aplicara la eutanasia. Lo anterior, por los sufrimientos que le han provocado expulsión de sangre de los pulmones y hemiparesia derecha en un cuadro de Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (Epoc) pulmonar, diabetes e hipertensión.
En su cuenta de Twitter @eutanasia16, aparece con su esposa contando el sufrimiento que vive día tras día. Ella, no lo ha dejado en la enfermedad y lo apoya en su deseo para descansar de tantos padecimientos.
Corte Constitucional le devolvió la esperanza
El 27 de junio, Escobar informó que se le había negado el derecho a morir dignamente. A través de una valoración en una clínica, la junta médica determinó que no era terminal. Su caso es de un paciente degenerativo. «Pedí la eutanasia y me la negaron, sufriendo 2 (A.C.V) tengo hemiparesia izquierda, sufro de Epoc Pulmonar, presión pulmonar alta, fibrosis, diabetes, hipertensión, el lado derecho del corazón lo tengo grande, expulso sangre de los pulmones Tengo 4 cirugías en la columna», escribió.
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Sin embargo, el 25 de julio los esposos sintieron que les había llegado una noticia positiva cuando la sala plena de la Corte Constitucional, por una votación de 6 contra tres 3, acogió una modificación sobre la eutanasia en Colombia. Según la misiva, ese derecho fundamental a morir dignamente cubre también a pacientes que no tienen enfermedades terminales, pero que a causa de sus padecimientos sufren de intensos dolores y condiciones.
A sus 59 años, Escobar dice que sería un descanso para él, su familia y quienes han visto su drama en redes. El 3 de septiembre recibieron un mensaje que los animo, porque quedaba radicado el procedimiento eutanásico ante Coomeva Eps. Pero el 20 de septiembre cuando acudieron a un centro de especialistas se encontraron con otro tropiezo.
Diana escribió en su cuenta de Twitter que «les informo hoy mi esposo @Eutanasia16 tenía cita de valoración para decirle lo de la eutanasia, pero la doctora que lo vio no tenía ni idea para que lo habían remitido donde ella, también la doctora no tiene conocimiento de cómo proceder en este caso de la eutanasia».
La Corte, con ponencia de Diana Fajardo, señala que las enfermedades que son incurables deben ser diagnosticadas por un médico. Para solicitar la eutanasia debe existir consentimiento del paciente ‘libre’ e ‘informado’. En la decisión se orienta a ‘no obligar a vivir’ a quien está bajo ‘intensos sufrimientos’ pues, incluso, esto recaería en la ‘crueldad’.
