Esta es la historia de José Fabio Rodríguez, un soldado presentado por militares como baja en combate.
PUBLICIDAD
El Tiempo reveló un desgarrador relato sobre un joven que militares presentaron como baja en combate.
La historia empieza el 24 de marzo de 2007, día en el que su madre, quien desea mantener su identidad reservada, lo vio por última vez.
“A la medianoche preparé una ollada de tinto, me tomé uno y me quedé esperándolo en una silla. Yo no podía dormir cuando él salía, y por eso siempre me avisaba si se iba a demorar. Pero esa noche no se reportó ” cuenta la mujer.
Hace tres años, el joven había decidido servir al país prestando servicio militar. Entró a la Brigada de Selva número 26, del batallón de Leticia (Amazonas).
En una operación, el joven sufrió una lesión de rodilla que lo llevó a cirugía y le cobró 6 meses de incapacidad. Luego de esta lesión, el hombre regresó a su pueblo para terminar de recuperarse.
Vivía en Granada, Meta, donde estudió y terminó su bachillerato para luego irse a prestar servicio militar.
PUBLICIDAD
La búsqueda de José Fabio
Luego de que su hijo no llegara a la casa, la madre salió a preguntar por todo el pueblo si alguien sabía sobre el paradero de José Fabio Rodríguez.
Algunos le dijeron que había sido visto tomándose unas cervezas con los amigos, su búsqueda la llevó al hospital, a la estación de policía y hasta al extinto DAS (Departamento Administrativo de Seguridad), pero sin resultados.
Al día siguiente fue al CTI de la Fiscalía pero primero debía esperar 72 horas para poner la denuncia por desaparición.
“A mi hija le pidieron que esperara más tiempo. Le dijeron que en esos días el único muerto que habían reportado era un guerrillero que habían matado en combate”, dijo la madre.
Un funcionario le mostró a la madre y su hija, unas fotografías de un hombre muerto en combate que se relacionaban con las características de José Fabio. Lamentablemente era él, y ya había sido enterrado como N.N. en el mismo pueblo donde nació.
¿Qué son los falsos positivos?
Este fue el nombre jurídico que se le dio a los inocentes asesinados y presentados como bajas en combate por parte del ejército nacional.
Estas bajas aumentaron fruto de beneficios que el estado le dio a las tropas como bonificaciones, permisos, vacaciones, ascensos, comisiones en el extranjero, reconocimientos y felicitaciones.
Las bajas se cuentan por miles, según el último informe de la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz), esta cifra asciende a 6402 y continúa en aumento.
Así encontraron a José Fabio
Cuando el cuerpo de José Fabio fue encontrado baleado y sin vida, habían inconsistencias que saltaron a la vista.
Lo primero es que pusieron un arma de corto alcance en su mano derecha cuando él era zurdo.
No tenía camuflado, su ropa era casual y no combinaba con el resto de su vestimenta.
Las botas de plástico que tenía puestas eran dos tallas más grandes que sus pies y se encontraban nuevas, esto no correspondía con el terreno y clima en el que estaba.
Según la versión de los militares, el joven fue dado de baja en combate de frente a la tropa, pero en los peritos balísticos se registró que fue de espaldas y solo una herida fue de frente.
El Meta, una gran fosa común
El Meta es el segundo departamento del país que más ejecuciones extrajudiciales registra con una suma de de 394 casos entre 2002 y 2008. Esto de acuerdo con datos de la JEP.
Después de que su madre exhumara el cuerpo del cementerio para darle cristiana sepultura, hombres armados llegaron al sepelio para amenazarla de muerte.
“Que no se le ocurra denunciar porque les matamos a toda la familia” le dijeron en plena velación.
Una madre busca de respuestas
“Yo sigo esperando que me digan qué fue lo que pasó y por qué mataron a mi hijo. Quiero que contesten todos esos mayores y generales, que digan algo. Necesitamos que se sepa la verdad” dice la madre de José Fabio Rodríguez.
