De cierres. Las protestas de comerciantes por las cuarentenas sectorizadas de la última semana son solo la expresión pública de una grave preocupación económica.
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¿Y las ayudas? Los grupos de comercio formal e informal han exigido a la Alcaldía replantear los cierres.
Los últimos días del mes de enero tuvieron una ola de protestas liderada por sectores de comerciantes de Bogotá. La oleada más fuerte se vivió en Suba, donde tres UPZ empezaron cierres este sábado que irán hasta el 12 de febrero. A pesar de esto, incluso en localidades no afectadas por las cuarentenas sectorizadas de 2021 como Santa Fe se ha visto la oleada de protestas.
El objetivo de las medidas de cuarentena presentadas durante el último mes por la Alcaldía ha sido contener el pico de coronavirus. Las medidas han indicado una reducción de los casos nuevos de la pandemia y la tasa de ocupación de camas de cuidados intensivos, aunque esta disminución ha llegado únicamente al 83% de las camas UCI. Según esta tasa, el consejo epidemiológico que se realizará este martes no levantaría la medida de alerta roja hospitalaria, por lo que cabe prever, por lo menos, un mantenimiento de las restricciones.
Esto afecta gravemente a los sectores comerciales de la ciudad, según encuestas realizadas por Fenalco y la Cámara de Comercio de Bogotá. El gremio comerciante aseguró que medidas como la cuarentena general para fines de semana, que se vivió en tres fines de semana consecutivos en la ciudad, han sido destructivas para el gremio que aporta el 20% del PIB.
«Las ventas durante fin de semana de cuarentena general caen entre el 80% y 100% para el 57% de los empresarios», aseguró Fenalco a PUBLIMETRO. Estos comerciantes afectados son, primordialmente, los que venden artículos de sectores como ropa, tecnología, belleza y electrodomésticos, que no hacen parte de los sectores designados como de primera necesidad y debieron cerrar los fines de semana.
Negocios en caída libre
La Cámara de Comercio de Bogotá reveló que durante el mes de enero, solo el 7% de las empresas de la ciudad y la Sabana operaron sin restricciones. Este es el mismo porcentaje de empresas cerradas definitivamente entre 951 encuestados. El 27% afrontó cierres temporales, y el 56% operó con restricciones que afectaron seriamente la capacidad de sostener miles de empleos.
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Muestra de esto es que durante el primer mes del año, el 67% de las mipymes encuestadas afirmó que sus ventas cayeron, y en el 44%, la caída fue mayor al 50%. Medidas como los toques de queda nocturnos, cuarentenas sectorizadas y la cuarentena total de fines de semana fueron los impactos que los encuestados determinaron que afectaron más gravemente sus negocios.
«Hay otro problema con estas cuarentenas sectorizadas. Hemos tenido muchos casos de empresas que no pueden abrir 15 días porque están en zonas en cuarentena. Pero los 15 días siguientes tampoco pueden abrir porque sus empleados viven en otros sectores donde hay cuarentena y no pueden salir de sus casas. Estas decisiones hacen que haya empresas con cuatro semanas efectivas de cierre», afirmó la agremiación.
De hecho, las medidas de cierre serían la mayor dificultad para una reactivación económica: el 22% de los encuestados por la Cámara de Comercio que dio esta opinión supera incluso al 20% que considera más importante el contagio de coronavirus, al desempleo (14%) o la inseguridad (13%).
¿Qué ayudas piden?
Para evitar cierres como los que, según Fenalco, han afectado a 58.000 comercios de Bogotá de manera definitiva, los gremios piden no solo asistencias como aplazar los cobros de impuestos o aumentar los subsidios de servicios públicos. El 27% de los encuestados por la Cámara de Comercio pidió que se permita operar sin restricciones, manteniendo protocolos de bioseguridad. Propuestas como la aplicación de Bogotá 24 horas también serían muy importantes, pero el mayor punto es suspender estas medidas.
En ese mismo sentido, líderes políticos del Concejo de Bogotá han pedido a la alcaldesa Claudia López medidas diferentes. La concejal conservadora Gloria Stella Díaz aseguró que hay una «montaña rusa» de la reactivación. Los sectores más afectados serían turismo, gastronómico y hotelería.
«Entre 2010 y 2019 el promedio de crecimiento de empresas en Bogotá fue de 6,4% anual. En 2020 se perdieron el 12% de las empresas de la ciudad, y esas pérdidas ascendieron a unos 6 billones de pesos. Si no existen garantías para la reactivación, la recuperación económica de la ciudad seguirá en vilo», aseguró la concejal.
Fenalco, por su parte, pidió medidas estables para garantizar una adecuada recuperación. «Necesitamos medidas que sean menos prolongadas e inequitativas para las empresas y los empresarios. Y necesitamos que haya la posibilidad de tener una estabilidad para poder realizar una planeación de los comercios, que nos permita atender las necesidades de los bogotanos», recalcó Fenalco.
La cifra
58.000
establecimientos comerciales cerraron en Bogotá en el marco de la pandemia, según Fenalco.