El cuerpo del joven arrojado a un caño el 25 de diciembre de 2020 en hechos confusos no aparece, y su madre lo busca desesperadamente.
PUBLICIDAD
Una llamada hizo que Johana Andrea Cañón viviera un día de Navidad de pesadilla. El pasado 25 de diciembre, recibió en su teléfono la conversación de un anónimo que le indicaba que su hijo, Julián Esteban Gómez Cañón, había sido asesinado. El cuerpo del joven arrojado a un caño de la localidad de Rafael Uribe Uribe ha motivado una tragedia para la familia.
Según narró Cañón a CityTV, en la mañana del 25 de diciembre la llamaron. «Ese día recibí una llamada, era de un anónimo, pero sabía mi nombre. Me decía que fuera a buscar a mi hijo, porque lo habían matado el 24 de diciembre», aseguró.
Recomendados
Se intensifica el debate sobre el uso de celulares en los colegios de Bogotá; 20 instituciones lo prohibirían
“Más de 1 millón de chocolatinas Jet se consumen diariamente”: Mónica Giraldo
Tras la salida de Antanas Mockus y Claudia López del Partido Verde, Jota Pe Hernández augura más renuncias
El anónimo que la llamó le dijo que el cuerpo del joven había sido arrojado en el canal Albina, a la altura del barrio Santander. Dos personas se habrían quedado con el joven de 20 años hasta su muerte. La mujer llegó a Bogotá y se dirigió inmediatamente a Medicina Legal para tratar de encontrar el cuerpo, pero allí empezó una odisea.
En Medicina Legal no apareció el cuerpo, y la Fiscalía aseguró que no había recibido un levantamiento. Posteriormente se dirigió al Cuerpo de Bomberos de Bogotá, que la asistió con la búsqueda. Aún así, el cuerpo del joven arrojado a un caño no ha aparecido, y la búsqueda estaría próxima a llegar a su fin.
Con el apoyo de bomberos, Johana y su familia han recorrido metro a metro el canal, pero no han encontrado nada. Desde el pasado 29 de diciembre pidieron acceso a las cámaras de seguridad, pero este ha sido imposible.