El pasado martes, en redes sociales se compartieron las fotografías de un pequeño de ocho meses que, supuestamente, había sido secuestrado mientras estaba con su madre en el oeste de Cali.
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La información se hizo viral y las autoridades se unieron a la búsqueda, aunque la familia no había puesto una denuncia formal ante la Policía.
Otro dato curioso de este caso era que los teléfonos de contacto que acompañaban las fotos no eran atendidos por nadie. Según lo que se sabe hasta el momento, todo fue parte de una pelea de pareja y el bebé nunca estuvo secuestrado.
La firma MV LEGAL CONSULTING ABOGADOS, que representa al padre del menor, emitió un comunicado a la opinión pública en el que aseguró que la madre mentía con la denuncia del rapto.
«El menor se encontraba con su padre, quien acudió a su visita en virtud del acuerdo conciliatorio al que llegaron los padres», indicó el abogado. En el documento se añade que a la casa del papá «acudió la madre acompañada de agentes de Policía, quienes tienen conocimiento de los hechos aquí narrados y quienes son testigos de lo sucedido».
También se rechazan las publicaciones que hablan del presunto secuestro, pues estas tendrían la intención de dañar el buen nombre del padre debido a que la mamá siempre supo que el bebé estaba con él.
Pelea en redes
Horas más tarde, cuando la Policía confirmó que el niño estaba bien y que todo había sido parte de una pelea de sus progenitores, en redes sociales se encendió la discusión entre sus familiares.
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Mientras unos afirmaban que toda la culpa la había tenido el papá, otros defendían a este hombre y señalaban a la mamá. Por lo pronto, se sabe que el secuestro nunca ocurrió.
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