Little Caesars, la tercera cadena de pizzerías más importante de Estados Unidos, llegó a Colombia en plena pandemia.
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La cadena de pizzerías llega al país y ya causa sorpresa por cómo venderá sus pizzas.
La franquicia indicó que la estrategia de ventas será de pizzas de muy buena calidad, con materiales de primera, pero con precios para todos.
La idea es que las pizzas familiares no sobrepasen los 30.000 pesos, lo que es de resaltar pues otras marcas son mucho más costosas.
«Veníamos viendo el mercado colombiano desde hace un tiempo y, ahora que llegamos, es muy importante que tengamos un socio estratégico como el que tenemos«, señaló a Dinero, Paula Vissing, vicepresidenta senior de Asuntos Internacionales de la empresa.
Y es que ante la pregunta de cómo lograrán un punto de equilibrio, aseguran que el secreto está en la automatización de los procesos.
La velocidad en los procesos, que montan la masa y la salsa en un mismo sitio, hace que se puedan despachar cientos de órdenes en una hora.
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La promesa es que si quiere una pizza de manera veloz, puede pedir una Hot-N-Ready, que está lista en dos minutos.
«Ya abrimos dos tiendas en un periodo corto, junto con un socio estratégico que es de los más importantes en la región. Por esto, consideramos que el crecimiento va a ser muy fluido, tanto en Bogotá como en otras ciudades de Colombia«, explicó Andrés de Robina, vicepresidente para América Latina y El Caribe.
