Los retrasos en la entrega de resultados de las pruebas COVID-19 impide que se conozcan, de manera oportuna, las cifras reales de la pandemia en Colombia y se tomen decisiones para mitigar los daños.
PUBLICIDAD
Así lo reconoció la Contraloría, entidad que alertó a los gobernadores, alcaldes y EPS sobre las consecuencias de dicha tardanza, que ha sido denunciada en repetidas ocasiones durante las últimas semanas.
De acuerdo con el organismo de control, el hecho de que los resultados no se conozcan a tiempo también conlleva la pérdida de vidas y un posible detrimento de recursos públicos.
El contralor general, Carlos Felipe Córdoba, informó que serán investigadas aquellas EPS que procesen las muestras luego de 72 horas de haber sido tomadas, o que cuyos resultados no se comuniquen oportunamente a los pacientes.
«Un diagnóstico que supere los tres días no tiene razón de ser para el ciudadano, como tampoco para las autoridades de planeación y vigilancia, perdiéndose así importantes recursos de todos los colombianos», dijo López.
¿Cuál es el problema? Según la Contraloría, hay una falta de coordinación entre las EPS y sus laboratorios. Esto genera represamiento de los diagnósticos e impide la toma de decisiones al ocultar la situación real del coronavirus en Colombia.
«Observamos con preocupación el desaprovechamiento e inoportunidad en gestión y uso de los recursos del Sistema de Salud, los de la Unidad de Pago por Capitación corrientes y extraordinarios, como también las otras fuentes del Presupuesto General de la Nación», indicó la entidad en un comunicado.
PUBLICIDAD
Más noticias de Colombia, aquí.
