Un tercio encerrado. Las ocho localidades de Bogotá que empezaron la cuarentena por localidades adelantan un cierre ordenado.
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Ayudas listas. Las localidades se han puesto el trabajo de complementar las ayudas recibidas a través de Bogotá Solidaria en Casa.
Juntos, pero… El aislamiento en localidades tan diferentes como Chapinero y Usme revela las profundas diferencias presentes en Bogotá.
Dos millones y medio de bogotanos están cumpliendo con la cuarentena por localidades, que este martes cumplió con su segundo día. Las localidades de Ciudad Bolívar, Chapinero, Santa Fe, San Cristóbal, Rafael Uribe Uribe, Los Mártires, Tunjuelito y Usme están en cierre de actividades. Para los alcaldes de las localidades en la cuarentena, la situación más importante es garantizar el cumplimiento de la medida.
Cada localidad ha tomado, de acuerdo con sus condiciones particulares, las medidas de rigor para proteger a sus habitantes. Entre ayudas monetarias y mercados, la idea es apoyar a las comunidades vulnerables en sus barrios. Uno de los recursos más fuertes ha sido un contrato entre la Cruz Roja y las 20 localidades de Bogotá, que ha permitido fortalecer la atención en ayudas en especie.
El alcalde local de Chapinero, Óscar Ramos, demuestra que la situación no escapa a la localidad que tiene algunos de los habitantes más ricos de Bogotá. Aún así, en el mismo espacio, sectores como Pardo Rubio, Divino Salvador y San Luis necesitan de ayudas. «Hemos entregado más de 6000 apoyos alimentarios con la Secretaría de Integración Social», ratifica.
Una situación muy diferente vive la alcaldesa local de Usme, Mabel Andrea Sua. La localidad en el extremo sur de Bogotá tiene la mayor población de víctimas del conflictode toda la ciudad. «Las ayudas de Bogotá Solidaria en Casa son críticas para nuestra población. Tenemos más de 10.000 subsidios monetarios y 25.000 en especie, y entregaremos 10.000 más con el apoyo de la Cruz Roja», asegura a PUBLIMETRO.
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Por las buenas
Aunque en general los bogotanos han cumplido, ha sido necesario sacar comparendos para quienes no acogen estas medidas. La Secretaría de Gobierno reveló que se impusieron 481 comparendos en lo corrido del lunes. En retenes y recorridos de los ocho alcaldes locales se hicieron estas imposiciones, mayormente por no usar tapabocas o abrir negocios ilegalmente.
El alcalde local de San Cristóbal, Ánderson Acosta, aseguró que en su localidad se impusieron 90 de estos comparendos. «Aunque tenemos sectores comerciales muy importantes en la localidad como el 20 de Julio, hemos visto que el 70% de los residentes ha atacado voluntariamente. Aún así estamos haciendo operativos en todos los sectores comerciales para evitar el incumplimiento del decreto 169», afirma.
Estos acuerdos también se han realizado en otras localidades. Ramos asegura que han permitido que solo se hayan interpuesto 61 comparendos en Chapinero, una de las localidades más densas y con mayor número de comercios en la ciudad. «Creemos que la gente es consciente de los riesgos del coronavirus, y por eso están cumpliendo», asegura.
Sua destacó que en su localidad, a pesar de los problemas que hubo durante la cuarentena que llegaron hasta a la imposición de peajes en plena Avenida Usme, los habitantes han «acatado muy bien» la medida. «Se han dado cuenta que estamos cerrando dos semanas para poder volver a abrir después, y no necesitar cierres interminables», resalta.
Los informales también ponen
En los sectores comerciales más importantes de la ciudad el problema había sido la venta informal. Aún así, la ciudad sigue tratando de mejorar las condiciones de los vendedores. Es crítico el efecto de estas ventas en sectores densamente habitados como las localidades del suroriente, donde los vendedores informales y sus clientes se mezclan sin poder contar con el distanciamiento social adecuado.
Un ejemplo es el sector del 20 de Julio, entre el santuario al Divino Niño y la Avenida Primero de Mayo. Vías como las carreras 6 y 7 mezclan densamente las ventas informales, ambulantes, negocio formal y viviendas. Aún así, con un diálogo adecuado, la administración de San Cristóbal logró despejar estas zonas de vendedores informales para poder garantizar el distanciamiento.
«Es imposible garantizar un distanciamiento social en vías como la carrera 6, que tiene menos de 6 metros de ancho. Esta vía tiene además bancos y almacenes que requieren hacer filas en su exterior. Con el apoyo del Ipes y la Secretaría de Gobierno logramos mover a los vendedores a otros puntos. Así podemos hacer que la ciudadanía se pueda mover y garantizamos el espacio», afirma Acosta.
El problema de las UCI
Una de las mayores preocupaciones está en la ocupación hospitalaria, que ya supera el 90% de la ciudad. Algunos de los hospitales más importantes de la ciudad llenaron su capacidad de camas UCI. Todos los mandatarios locales consultados por PUBLIMETRO hacen un llamado a cumplir con las medidas de cuarentena y aislamiento.
La situación más crítica se presenta en la subred Centro Oriente. Allí los hospitales Méderi (con 60 camas ocupadas), San José, La Samaritana y las clínicas San Rafael, Centenario y Colombia se llenaron. Aún así esta situación no es exclusiva de la red oriental ni de hospitales privados.
La congestión también se registra en la subred Sur con hospitales como El Tunal, que tiene sus 85 camas UCI saturadas. La subred norte tiene copados hospitales de prestigio como la Fundación Santa Fe, con 49 camas llenas, y el San Ignacio, con 29 camas llenas. En la subred Sur Occidente la crisis saturó las UCI de la localidad de Kennedy: el Hospital Kennedy y las clínicas de Occidente y Roma están llenas.
La cifra
481
Comparendos se impusieron el lunes 13 de julio, primer día de cuarentena por localidades.
