Catalina Lotero y Felipe Guarín son dos jóvenes diseñadores colombianos que se encuentran cursando una maestría en Ciencia del Diseño, en la Universidad de Keio, en Tokio, Japón. ‘Branding humanitario’ para prevenir la COVID-19 en rincones alejados de las ciudades.
PUBLICIDAD
A principios de febrero, cuando vieron que el nuevo coronavirus comenzó a salir de China, y había miedo y desinformación, decidieron canalizar su sentimiento de angustia y volcarlo en buscar soluciones desde sus áreas de experticia.
“Buscamos instituciones que estuvieran haciendo retos de diseño alrededor del mundo para hallar soluciones frente a la pandemia y que estuvieran alineadas con nosotros, entonces encontramos el reto de la Universidad MIT”, cuenta Guarín.
A la convocatoria de esta prestigiosa universidad (la mejor del mundo según El QS World University Ranking 2020) aplicaron 4.500 personas, de las que escogen a 1.500 innovadores y a 200 mentores de todo el mundo. Tras esto comenzó una ‘hackaton’ virtual en la que los colombianos recibieron tutorías y unos mentores que les ayudaron a pulir la propuesta que venían trabajando desde hacía tiempo. La presentaron al panel de jueces del MIT Challenge y al siguiente día fueron elegidos como unos de los 40 ganadores.
Los equipos debían proponer soluciones sobre cómo proteger poblaciones vulnerables y/o cómo ayudar al sistemas de salud. Por eso la propuesta de Catalina y Felipe se sustentó en su aprendizaje sobre la cultura del uso de lo tapabocas en Japón.
Su idea de ‘branding humanitario’ busca que las marcas donen espacio en las etiquetas de sus productos para poner allí información útil sobre cómo protegerse del coronavirus, esto debido a que muchas poblaciones alejadas de las ciudades tienen acceso limitado a esta información vital. Sin embargo, muchos productos básicos si llegan a esos hogares.
PUBLICIDAD
‘Branding humanitario’ para prevenir la COVID-19 en rincones alejados de las ciudades
“Cuando desarrollamos la idea de branding humanitario la sacamos tras identificar que la mayoría de las propuestas que estaban saliendo dentro del MIT Challenge estaban relacionadas con tecnología. Hablaban de hacer videos “que todo el mundo podía entender”, pero nosotros sabiendo cómo funcionan los países en vía de desarrollo sabemos que no hay conexiones de Internet estables. Por eso vimos la necesidad de hacer algo análogo”, cuenta Catalina Loreto.
Ahora, el gran reto es dar a conocer su idea para que muchas marcas se unan a esta iniciativa y poder salvar la vida de muchos colombianos y habitantes de otros países.
“La respuesta ha sido muy positiva porque las empresas tienen unas ganas genuinas de ayudar, pero necesitamos muchas más empresas que se unan, que tengan esa voluntad y que se manifiesten para poder entrar en el proceso de ver cuáles son sus sistemas de distribución y ver cómo llegar al público al que queremos hablarle”, dice Felipe Guarín.
“Por la forma en la que se ha movido el virus vemos mucha importancia en que la estrategias que se puedan llevar a cabo en Latinoamérica. Los números están aumentando mucho en Brasil, Perú, México y por supuesto en Colombia”, dice Lotero.
Lo bueno es que los diseñadores ya han logrado entablar conversaciones con algunas importantes empresas como Bavaria, a través de su área de sostenibilidad. También han hablado con Alianza Team para poner la comunicación en sus botellas de aceite Oliosoya, y con Justo y Bueno también podrán llevar a cabo la idea en los empaques de varios de sus productos.
“La micro innovación que estamos haciendo nosotros es la de querer cambiar comportamientos a través de educación. Muchas veces se usa esto para informar pero no para educar”, dice Lotero.
Los diseñadores también advierten que con esta idea no solo se beneficia la causa, sino también la marca. Según las investigaciones que han hecho sobre iniciativas similares, por ejemplo con la campaña contra el cáncer de mama, los productos han llegado a doblar sus ventas.
“Estamos pasando por un cambio y estamos utilizando la excusa del virus para una nueva oportunidad y lo que va a pasar es que vamos a comenzar a exigirle más a las marcas sobre a quién contratan, si son homofóbicos o racistas, si los materiales que usan son sostenibles, si son biodegradables, o a qué causan ayuden. Cada vez que pagamos por un producto estamos votando para que una empresa le pague o no bien a sus empleados, por ejemplo. Hay que ser conscientes de por quién votamos todos los días con nuestro dinero”, afirma Lotero.
El llamado es para las empresas que quieran unirse a la iniciativa. Vincularse no tiene ningún costo. Se puede acceder al material y diseños a través de www.brandinghumanitario.com o al correo hola@brandinghumanitario.com.
MÁS NOTICIAS DE COLOMBIA Y EL MUNDO, AQUÍ.
También le puede inetresar: